Asegura que el número de alergias en un país aumenta a medida que lo hace su nivel de desarrollo y que, dentro de España, la tipología de esta enfermedad varía en función de la comunidad autónoma. "El 80% de los coruñeses alérgicos, lo son a los ácaros", sostiene el jefe del Servicio de Alergología de el Hospital Universitario de A Coruña, Antonio Parra.

-La alergia a los ácaros protagoniza el otoño, ¿no hay casos de alérgicos al polen estos meses?

-La alergia al polen es más estacional, suele aparecer de abril a junio, pero sí es cierto que puede haber casos en otoño. Ahora mismo, en Galicia, el principal problema serían las herbáceas como la parietaria, presente especialmente en A Costa da Morte.

-Cada vez hay más alérgicos, ¿a qué se debe?

-Los casos de alergia se duplicaron en la última década y eso está relacionado con el nivel de desarrollo que tenga un país. Está demostrado que hay algo en el ambiente que ha provocado que nuestra respuesta a estos alérgenos varíe.

-¿Tiene que ver con la teoría de que ahora hay una higiene excesiva que lleva a ser más vulnerables a ciertos elementos?

-En parte sí. Puede que el cuerpo humano esté muy cómodo ahora sin tener que luchar contra bacterias , pero esta teoría también tiene ciertos claros y oscuros. Lo que sí está demostrado es que depende del nivel de un país. Un ejemplo fue cuando se derribó el muro de Berlín, había diferencia en el número de alérgicos de una Alemania a otra y ahora, las dos están igualadas.

-¿Es la vacuna la curación para las alergias?

-La vacuna es un tratamiento que, al contrario que los fármacos, cambia el sistema inmunológico, de forma que empieza a tolerar los alérgenos. Pero no puede aplicarse a todos los alérgicos.

-¿Quién no debe vacunarse?

-No es aconsejable en quienes tengan el asma mal controlada o niños con alergias a muchas cosas.