24 días de estancia media, un total de 84 camas y alrededor de 750 pacientes cada año. Éstos son los números del Servicio de Cuidados Continuos/Paliativos del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac), que este año celebra su 15º aniversario, con el objetivo de seguir ofreciendo a los pacientes con patologías incurables y a sus familias "la mejor asistencia posible". "Seguimos con la misma ilusión por hacer bien nuestro trabajo que el primer día", subraya el responsable del servicio, Juan Sanmartín, quien insiste en que la finalidad de los cuidados paliativos "no es ayudar a morir, sino a vivir hasta el final, controlando los síntomas de la enfermedad".

El Servicio de Cuidados Continuos/Paliativos del Chuac, el más antiguo de Galicia, abrió sus puertas allá por el mes de febrero de 1996 en el Hospital Marítimo de Oza y, desde entonces, no ha dejado de funcionar para, tal y como reconoce su responsable, "mejorar, en la medida de lo posible, la calidad de vida de los pacientes con una enfermedad que no tiene cura y también la de sus familiares". "La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo dice muy claro: el objetivo de los cuidados paliativos es aliviar el dolor y los síntomas de los pacientes, pero también dar apoyo psicológico a sus familias durante la enfermedad y el duelo", subraya Sanmartín.

El Servicio de Cuidados Continuos/Paliativos del Chuac dispone de un total de 84 camas, la mitad destinadas a pacientes procedentes del hospital de agudos que continúan allí su recuperación funcional y, el resto, a la atención específica de enfermos que requieren cuidados paliativos. "Nuestro servicio es polivalente. Por un lado atendemos a enfermos que requieren cuidados paliativos y, por otro, a los que están convalecientes. En el caso de los paliativos, además, no nos limitamos a asistir a pacientes con cáncer y otras dolencias, sino que también tratamos a enfermos con necesidades sociosanitarias", apunta el doctor Sanmartín.

Pero la labor de los profesionales del Servicio de Cuidados Continuos/Paliativos del hospital coruñés va más allá de la asistencia hospitalaria a los enfermos. "El paciente donde realmente quiere estar es en su casa, por lo que el sitio prioritario donde se tienen que desarrollar los cuidados paliativos es en el domicilio. Por eso intentamos potenciar cualquier posibilidad de atención al enfermo en casa a través de diversos equipos de soporte, de hospitalización a domicilio... Y se ha demostrado que es realmente eficiente. Entre el 70 y el 80% de los pacientes son ya atendidos en sus casas. Pero queda otro grupo muy complejo porque no tiene cuidador o porque éste se fatiga, por tener medicaciones complejas, vivir lejos del hospital... Para ellos están las camas", subraya el especialista coruñés.

Sobre el desarrollo en general de los cuidados paliativos en Galicia, el doctor Sanmartín se muestra razonablemente satisfecho. "Las unidades de paliativos se han duplicado, al pasar de tres a siete, una en cada hospital. Además, antes no había equipos de soporte, y ahora tenemos seis", explica, y añade: "Estamos en los puestos altos del ranking español, y a esto contribuye el Plan Galego de Coidados Paliativos, y el hecho de que tengamos una buena oferta de recursos, con equipos de soporte, incluso, en las zonas donde la población está más dispersa".