Galicia registró durante el pasado año 163 nuevos casos de infección por VIH, de los que el 45% se dieron a través de relaciones sexuales entre hombres sin la debida protección, una circunstancia que es, además, la primera forma de transmisión en la comunidad.

Así lo señaló ayer el director xeral de Innovación e Xestión da Saúde Pública, Manuel Varela Rey, durante la presentación de los datos del Sistema de Información Gallego sobre infección por el VIH en el periodo 2004-2010.

Durante 2010, el número de nuevos casos de VIH entre los hombres gallegos fue de 132, frente a 31 nuevas mujeres infectadas. En ambos casos, la vía sexual fue la prioritaria, con 26 casos en mujeres y 109 en hombres. Asimismo, la transmisión homosexual entre hombres alcanzó los 74 casos, el 45% del total.

Por provincias, A Coruña fue la más afectada, con 94 nuevos casos en 2010, seguida de Pontevedra, con 51; Lugo, con 11; y Ourense, con siete nuevos casos de infección por VIH.

Varela Rey señaló que la incidencia del virus VIH en Galicia ha disminuido en el último año, al pasar de 213 nuevos casos de infección en 2009 a 163, en 2010. Además, la tasa por millón de habitantes continúa muy por debajo de la registrada en España.

Para el periodo 2004-2010, la media de infección por VIH en Galicia fue de 75 casos al año por cada millón de habitantes, mientras que en el conjunto del Estado la cifra aumenta hasta los 91 casos al año por cada millón de habitantes. La tendencia es "a la baja", indicó Varela Rey.

Entre 2004 y 2010, se declararon en Galicia 1.431 nuevos diagnósticos de VIH y únicamente 612 casos de sida -enfermedad que presentan en los últimos años una incidencia de una veintena de nuevos casos por millón de habitantes en la comunidad autónoma gallega-.

Varela Rey señaló que, en la actualidad, la primera práctica de riesgo para la infección por VIH/sida es "la transmisión por vía sexual sin protección", sobre todo en el caso de las relaciones homosexuales entre hombres, que son "la primera causa" de transmisión en Galicia a pesar de una bajada con respecto a 2009.

En contraposición, la transmisión por compartir material de inyección entre usuarios de drogas ha ido disminuyendo en los últimos años y supone menos del 30% de los casos del periodo 2004-2010.

"El número de nuevos casos está bajando, pero la vía sexual cobra más fuerza", indicó el director xeral, quien atribiyó esta situación a una cierta "relajación" en las medidas de protección por parte de generaciones jóvenes que ya no ven la enfermedad como tan "terrorífica", por lo que ha hecho un llamamiento a incrementar las medidas de protección.

Según señaló el responsable autonómico, el 46% de los nuevos casos de infección presentan un "diagnóstico tardío", lo que supone que casi la mitad de los afectados podrían haber iniciado antes su tratamiento.

Durante su intervención, Varela Rey recordó que un diagnóstico tardío provoca un "peor pronóstico" para el paciente.