El 3,5% de los estudiantes españoles de entre 14 y 18 años (76.000) ha experimentado alguna vez con alguna de las llamadas drogas emergentes -sustancias que aparecen en el mercado en un momento determinado como una novedad- y las "setas mágicas" son las preferidas por estos jóvenes.

Así aparece recogido en un informe elaborado por la Comisión Clínica sobre Drogas Emergentes, presentado ayer por la delegada de Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Nuria Espí, quien señaló que estos datos no son "muy preocupantes", por lo que "aún estamos a tiempo".

Pese a ello, los expertos advierten de la capacidad de estas sustancias para provocar adicciones.

"Del colocón a la intoxicación grave hay un margen muy pequeño", aseguró Magí Farré, catedrático de Farmacología de la Universidad Autónoma de Barcelona y miembro de la Comisión Clínica.

El informe pone de manifiesto la dificultad de definir el concepto de drogas emergentes, que incluyen un grupo amplio, cambiante y muy diverso de sustancias naturales, sintéticas o semisintéticas, conocidas o desconocidas.

También alerta de que, generalmente, las drogas emergentes no están incluidas en las listas de sustancias psicotrópicas o estupefacientes, ya que a veces se trata de productos que están comercializados, como sales de baño.