La crisis, la publicidad y las redes sociales han provocado que el número de donantes de óvulos y semen se incremente desde 2008, aunque siga sin existir un registro oficial que controle cuántos hijos tiene un mismo donante en España, algo que según la ley no puede ser superior a seis.

Profesionales de diferentes clínicas coinciden en criticar la ausencia de un mecanismo para poder contabilizar a estos donantes en un marco estatal, un propósito planteado en las sucesivas legislaciones de reproducción asistida aprobadas desde finales de los 80 por distintos gobiernos pero sin llegar a materializarse. Ahora, con el aumento de donantes de óvulos o semen, en algunos casos motivados por la compensación económica -de hasta 900 euros para las mujeres y sobre los 50 euros para los varones-, una base de datos común resulta fundamental para evitar "la tournée" (la gira). "Me enteré de que una amiga iba saltando de clínica en clínica. Primero, en Alicante; después, en Valencia. Lo hizo varias veces". Así es como define la citada "gira" una auxiliar del hospital de Elche.