La coruñesa Sara Coleman presenta hoy su colección Subacquatic con la que pretende transmitir "la sensación de que te evades del mundo, que se produce cuando estás bajo el agua".

-¿Por qué una colección basada en las profundidades del mar?

-Por la relación personal que tengo con el mar, he querido plasmar las sensaciones que sientes bajo el agua a la colección.

-¿Cómo se aprecia la influencia marina en las prendas?

-Por una parte en los colores ya que utilizo el naranja de las estrellas de mar, el coral, el blanco... y también en los tejidos. Opto por tejidos naturales como el lino o el algodón porque son más cómodos y transpira mejor la piel, algo que en verano es importante.

-Hay quien cree que lo que se ve en las pasarelas no es ponible en la calle...

-Es que lo que se intenta en un desfile es llamar la atención y para lograrlo hay que salirse de lo normal. Un claro ejemplo es París. En España, sin embargo, se nos acusa de ser demasiado comerciales, de no llevar algo potente a la pasarela. En mi caso intento llevar una colección con prendas pensadas para la pasarela pero también con otras más comerciales.

-¿A qué tipo de clientes van dirigidos sus diseños?

-Son personas que buscan el diseño, la calidad hecha en España, que quieren piezas exclusivas, especiales y que duren en el tiempo. Está claro que nuestro perfil no comparte el actual concepto de servilleta de papel, es decir, comprar una prenda para que dure ese fin de semana.

-La crisis por tanto, ¿no les toca a las grandes firmas?

-No sufrimos tanto como las grandes industrias porque no tenemos tanta carga de empleados, pero hace que se intenten buscar nuevos mercados en el exterior. Nosotros apostamos por Rusia y los países nórdicos y nos gustaría llegar a Francia o Japón.

-¿Qué supone para una firma como la suya ir a Cibeles?

-De forma inmediata es una forma de promocionar la marca y a largo plazo, permite realizar contratos en países que te conocen porque has estado en Cibeles.