El coordinador en Galicia del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Eduardo Pardo de Guevara, confirmó ayer a LA OPINIÓN que sus siete centros gallegos notarán el déficit que sufre el organismo, y que incluso habrá que aparcar la inversión de 32 millones que tenía previsto realizar dentro del proyecto del Campus do Mar de Vigo. El presidente del CSIC, Emilio Lora, ya había reconocido que hasta 2015 la institución tendrá déficit y en los últimos años este organismo ya ha tenido que meter las tijeras en sus presupuestos para paliar los 150 millones de deuda que arrastra.

Los nuevos tijeretazos se notarán en el capítulo de personal -las nuevas incorporaciones quedan eliminadas-, en el de gastos corrientes y, sobre todo, en la contratación de obras. Una de las consignas, explicó Eduardo Pardo de Guevara, es la paralización de nuevas obras, lo que repercutirá en la suspensión de los proyectos previstos para la ETEA, en Vigo, y el Incipit, en Santiago. Ni siquiera se atreve a dar una fecha para reanudar el proyecto. "Creo que de aquí a 2015 va a ser prácticamente imposible. El objetivo ahora es enjugar el déficit", subrayó. "Es muy pronto aún para hacer un análisis detallado de lo que implicarán los recortes para Galicia, salvo en lo que es el frenazo en la contratación de obra nueva, que sí afecta", admitió. "El tema de la ETEA queda parado de momento, igual que el Incipit", admitió.

En el nuevo escenario, tal y como explicó, la prioridad es "mantener la actividad investigadora" y el personal, que es "sagrado". Porque lo que queda descartado, de momento, es un ERE, enfatizó. Ahí se sitúa, dice, "la línea roja". Para lograrlo, no solo se están usando calderos por no poder reparar las goteras en algún centro, sino que incluso hay muchas posibilidades de que haya que cerrar algunos centros durante determinados períodos del año con menos actividad.

Galicia seguirá los pasos de Madrid, donde este verano un inmueble permaneció clausurado durante quince días. Reducir gastos -los corrientes implicarán sacrificios incluso con la calefacción, dice- será uno de los dos pilares de la política de austeridad. Por otro lado, el CSIC intentará incrementar sus ingresos, incrementando su participación en proyectos europeos.

Pardo de Guevara aprovechó la ocasión para hacer un "llamamiento" al Ejecutivo gallego. "Tenemos que resolver de una vez las negociaciones con la Xunta para financiar las investigaciones. Llevamos dos años sin recibir ayuda alguna de la Xunta", explicó. Además, la cuantía de las contribuciones autonómicas es "importante" para el CSIC porque representa alrededor del 30% de los recursos que capta la institución en Galicia. Para Pardo de Guevara, este asunto es "incómodo" y supone, dice, "un agravio comparativo", por cuanto las universidades sí han recibido financiación para sus programas de investigación.

De cara al próximo año, aseguró que estarán "garantizadas" las nóminas del personal y el desarrollo de la actividad científica". No habrá nuevas contrataciones por mandato estatal y se suprimirán las becas JAE.