Un equipo médico de EEUU aseguró ayer que ha conseguido curar a un bebé con VIH por primera vez en la historia, en un caso que podría abrir un nuevo capítulo en el tratamiento de los niños seropositivos. El bebé, una niña nacida a finales de 2010, recibió un tratamiento agresivo de retrovirales desde alrededor de 30 horas después de su nacimiento, algo que no es habitual.

La niña tiene ahora dos años y medio y ha estado sin medicamentos durante el último año, sin que se hayan registrado señales de un virus activo, según los médicos.

Aunque se necesitan más pruebas para comprobar si el mismo tratamiento funciona en otros niños, los investigadores consideran que el caso demuestra que el VIH en bebés puede ser curable, y anticipan que el estudio cambiará la forma en que los recién nacidos y las madres infectadas son tratados en todo el mundo.

Si la comunidad médica valida el estudio, la niña de Mississippi sería, además, el segundo caso bien documentado de una cura de VIH en el mundo. El primero es el conocido como el paciente de Berlín, Timothy Brown, que supuestamente se curó tras recibir en 2007 un trasplante de médula ósea de un donante genéticamente resistente a la infección con VIH.

Los médicos españoles, sin embargo, piden ser prudentes con la noticia. "Todo parece indicar que podría ser un caso excepcional, como los que se dan en ocasiones en la medicina", señala el especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Ramón y Cajal de Madrid José Luis Casado. "Hay que ser prudentes, nada debe llevar a pensar que hemos avanzado nada en controlar la infección"; y, por su puesto, añade:"Seguir insistiendo en que la mejor manera de evitar que un niño tenga VIH es detectar y tratar a las madres".