La Audiencia de Santiago acaba de notificar la sentencia que condena a 10 años de prisión al ladrón del Códice Calixtino, José Manuel Fernández Castiñeiras, muy por debajo de los 18 años que solicitaba el fiscal y los 30 que pedía la Catedral. Le absuelve de los delitos contra la intimidad por la documentación que tenía en su poder de distintos miembros del cabildo de la Catedral. Le consideran responsable de un delito de hurto, delito de hurtode un delito continuado de robo con fuerza en las cosas y de un delito de blanqueo de capitales.

Por el hurto le imponen 3 años, por el robo con fuerza cinco años y por el de blanqueo dos años. Y una multa de 268.425 euros. Se condena también al exelectricista a indemnizar al antiguo deán José María Díaz Fernández, con 2.720 euros. Ellos que fueran antiguos amigos y precisamente fue una supuesta venganza contra el exdeán por un asunto laboral lo que habría llevado al robo del Códice.

Además, el fallo recoge la absolución del hijo e impone 6 meses de prisión a su mujer por un delito de blanqueo de capitales. A Remedios Nieto se le impone multa de 268.425 euros.

Se decreta además el comiso del piso del edifico de A Lanzada, sus dos plazas de garaje y un trastero. Y del inmueble de O Milladoiro en Santiago, donde residía el matrimonio con sus dos plazas de garaje y otro trastero.

La indemnización de José Manuel Fernández Castiñeiras a la Catedral de Santiago se fija en 2.447.590 euros y 30.106 dólares, a cuyo efecto se aplicará al pago de dicha indemnización las cantidades de dinero intervenidas al acusado. Además de restituir a la Catedral el Códice Calixtino, también se devuelven los ejemplares en facsímil que le fueron intervenidos así como los del Libro de las Horas, y el Offium Virginis y toda la documentación intervenida perteneciente a la Catedral.