Los centros educativos gallegos de Primaria y Secundaria iniciarán el próximo curso la implantación progresiva del idioma portugués como lengua extranjera de opción y evaluación curricular, con el objetivo de "revitalizar su pasado lingüístico común" y "consolidar sus perspectivas de futuro", tal y como destacó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

El mandatario gallego y el presidente de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, encabezaron la firma, en la sede de la Real Academia Galega (RAG), en A Coruña, del Memorando de entendimiento entre el Gobierno autonómico y la embajada del país luso en España para la adopción de esta lengua como asignatura en el sistema educativo no universitario gallego. En virtud de este acuerdo, suscrito por el embajador portugués Francisco Riveiro de Meneses y el conselleiro de Educación y Cultura, Román Rodríguez, el Instituto Camões luso se ocupará de la formación de los docentes gallegos que quieran impartir clase de portugués desde el próximo curso, un título al que Galicia otorgará validez a la hora de puntuar en concursos y oposiciones. Un total de 32 centros gallegos de Secundaria enseñan ya, en la actualidad, el idioma del país vecino.

Núñez Feijóo señaló que el acuerdo "abre el puente de la lusofonía" y recordó que el portugués es "la sexta lengua más hablada del mundo, la quinta con mayor presencia en internet y la tercera en Facebook y Twitter". El presidente de la Xunta reiteró que "aprender portugués vale la pena para todos los gallegos", estudiantes y empresarios o integrantes del mundo de la cultura, porque un ciudadano que hable este idioma, el gallego y el castellano "sabrá manejar las lenguas maternas de más de 730 millones de personas", lo que supone un "auténtico privilegio". El mandatario gallego insistió, además, en que la enseñanza del portugués ayudará a "revitalizar nuestro pasado lingüístico común" y ofrece "muchas perspectivas de futuro".

Por su parte, Cavaco Silva calificó el acuerdo de "paso muy importante" en las relaciones entre su país y la "comunidad autónoma amiga" de Galicia. El presidente luso subrayó que cerca de 2.000 jóvenes gallegos ya estudian portugués y vaticinó que el nuevo escenario que ahora se abre contribuirá "al mejor conocimiento científico, un mayor diálogo cultural y unas relaciones económicas y comerciales más fuertes".

La rúbrica del memorando también contó con la presencia del presidente del Consello da Cultura Galega, Ramón Villares, y del secretario de la RAG, Henrique Monteagudo, quien calificó el acto de "histórico" y destacó que la enseñanza del portugués redundará en un mejor conocimiento del gallego. El gran ausente en la sede de la calle Tabernas fue el presidente de la institución, Xesús Alonso Montero, quien no pudo asistir por encontrarse indispuesto. Fuentes de la RAG aclararon a este periódico que Alonso Montero atraviesa un "fuerte proceso gripal". "Está tristísimo por no poder participar en este acto, que le hacía especial ilusión", subrayaron.