La televisiva monja Lucía Caram será la primera invitada del programa En la caja, cuya segunda temporada se estrena mañana, a las 22.30 horas, en Cuatro según adelantaba ayer formulatv.com. La cadena no ha desvelado qué lugar visitará la religiosa, pero sí que hablará con diferentes personas acostumbradas a vivir entre el lujo, lo que despertará en varias ocasiones la indignación de Caram.

Una de las anécdotas que adelanta formulatv.com es la que sucede cuando Sor Lucía charla con Rafa, uno de los solteros que participó en el programa ¿Quién quiere casarse con mi hijo? de Cuatro. La religiosa le pregunta por el precio de un Ferrari y cuando el joven contesta que adquirir uno de estos vehículos cuesta "unos 300.000 euros", Caram no puede más que mostrar su indignación. "Esa fue la cantidad que me costó a mí construir un espacio donde va la gente a ducharse", le responde la religiosa, según adelanta la web especializada en contenidos televisivos.

Como es habitual en este programa, el protagonista de En la caja desconoce a qué sitio irá, con quién se encontrará y qué entorno concreto va a conocer. Para lograrlo llegará al lugar donde se desarrollará el programa metido en una caja de grandes dimensiones que tendrá que romper "física y metafóricamente" para someterse al implacable veredicto de la realidad, explican en formulatv.com, donde recuerdan que se trata de un programa sin guión ni indicaciones.

Por ello, la cadena no adelanta qué va a conocer Sor Lucía, pero sí sus primeras impresiones. "Me da la impresión de que estoy entrando en un mundo donde hay mucha pasta", señala la monja en una de sus primeras declaraciones en el programa de Cuatro, quien no dudará en opinar y calificar a cada uno de sus interlocutores. De Rafa, de ¿Quién quiere casarse con mi hijo?, tiene claro que es "un esclavo de sus necesidades creadas e inventadas". Lucía también tendrá que ver cómo hay lista de espera para adquirir un exclusivo bolso de marca. "Se me funden todos los plomos", explica.

En la caja deberá competir en la misma franja horaria que La Voz en Telecinco, la serie Sin identidad en Antena 3 o Pesadilla en la cocina de La Sexta. El objetivo de Cuatro es mejorar los resultados de audiencia que en la primera temporada apenas superó el millón de telespectadores y el 6,1% de cuota media de pantalla.