La Oficina Regional europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha planteado a sus Estados miembros una hoja de ruta para reducir el tabaquismo en la que, entre otras cuestiones, propone impulsar leyes para proteger del humo del tabaco a los niños en el ámbito escolar, sus hogares y en el interior de los coches. La hoja de ruta se ha presentado en la 65 reunión de este organismo de Naciones Unidas que se está celebrando en Vilnius (Lituania), y el objetivo es que las generaciones futuras perciban el tabaco como "algo del pasado".

"La generación que está creciendo ahora no puede entender que la gente fumara en aviones, autobuses, restaurantes u oficinas. Los logros de los últimos 20 años muestran que el sueño de una Europa en la que la lucha contra el tabaco tenga éxito no es algo irreal", defendió Zsuzsanna Jakab, directora regional de la OMS en Europa.

Entre las propuestas de los expertos se enumeran las acciones de mayor impacto para reducir y "desnormalizar" el consumo de tabaco, para lo que plantean el desarrollo de una legislación libre de humo que se centre en aquellos ámbitos donde están presentes los niños, citando colegios, hogares o automóviles, entre otros.

Del mismo modo, proponen alertar de los riesgos que supone el tabaquismo pasivo, en especial para aquellos menores que lo sufren en el interior de los coches o de sus viviendas. En este sentido, Reino Unido ha sido pionero, prohibiendo el consumo de tabaco en los coches donde viajen menores.

La hoja de ruta de la Organización Mundial de la Salud también incluye prohibir cualquier tipo de publicidad, promoción o patrocinio a las tabaqueras en la industria del entretenimiento o de los medios de comunicación; y mejorar la formación de los profesionales sanitarios y el apoyo a las familias que tomen medidas para reducir el consumo de tabaco.