El Juzgado de primera instancia número seis de Santiago, que era el que entendía del llamado caso Andrea, emitió ayer un auto en el que se comunica el archivo de la causa, el cual determina el "lamentable fallecimiento" de la menor. El magistrado Roberto Soto agradece en esta resolución la "profesionalidad y absoluta colaboración" del actual médico responsable de la asistencia a la pequeña y del jefe del servicio de Pediatría del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) en el que la niña estaba ingresada. Asimismo, celebra "la extraordinaria entereza" de los padres de esta paciente, Antonio Lago y Estela Ordóñez. El magistrado recuerda en el auto que un informe del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) concluyó que la niña estaba "padeciendo dolor" y un "sufrimiento desmesurado" antes de procederse finalmente a su sedación.