Sanitarios de A Coruña, Vigo y Ourense salieron ayer a la calle para denunciar recortes y privatizaciones en el sector y exigir una vez más una sanidad pública y de calidad. A las jornadas de huelga convocadas por los sindicatos de los hospitales de Vigo y Ourense -en el primero para protestar por los problemas y la gestión del nuevo Hospital Álvaro Cunqueiro y en el segundo por la falta de acuerdo con la gerencia en cuestiones laborales- se sumó una concentración en las inmediaciones del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac). Una protesta que, aunque inicialmente era en apoyo a los trabajadores del Álvaro Cunqueiro, sirvió también para que los trabajadores alertasen sobre problemas en el centro. La presidenta de la Junta de Personal, María Seijo, denunció "la situación de emergencia" de algunas unidades del hospital como neurocirugía, neumología, urgencias o infecciosos debido a "los recortes de personal". "Es imprescindible un incremento de plantilla", señaló la portavoz.

Con pancartas y proclamas como Sanidad pública de calidad y Contra la privatización de la sanidad pública, los participantes -casi un centenar- colocaron también, a sus pies, una sábana blanca con diversos insectos para denunciar las condiciones de apertura del nuevo hospital de Vigo. "Hay ratones y goteras", manifestó María Seijo sobre la situación del hospital de Vigo, además de denunciar también la "suspensión de quirófanos".

En este sentido, Seijo señaló que las privatizaciones afectan a otros hospitales como el de A Coruña. En concreto, en este caso cuestionó la privatización de los servicios de mantenimiento. "Hay un mal servicio en electromedicina", citó como ejemplo tras remarcar que hay camas eléctricas "estropeadas". Desde el hospital ya indicaron la semana pasada que pese a que ahora ciertos servicios de mantenimiento son realizados por empresas, esto no ha afectado a la plantilla del hospital ya que se mantiene el mismo número de trabajadores de mantenimiento.

En Vigo, la jornada de 24 horas de huelga en protesta por el modo de gestión del nuevo hospital Álvaro Cunqueiro fue todo un éxito según los sindicatos que cifran el seguimiento en un 90% mientras que el Sergas lo redujo al 30,8%. El presidente de la Junta de Personal, Ángel Cameselle, señaló que servicios como laboratorio, Anatomía Patológica o Rehabilitación estuvieron "inactivos" y que en otros como quirófano funcionó con "el 10% de la plantilla". En paralelo a la huelga, centenares de trabajadores y usuarios se concentraron en las inmediaciones del hospital para denunciar aspectos como que el aparcamiento sea de pago, la contratación de trabajadores privados para realizar funciones de celadores o la mala gestión de los traslados. El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, confirmó ayer que mantendrá el contacto con los trabajadores del complejo hospitalario vigués, ya que "lo más importante en este momento es el diálogo y hacer un gran proyecto".

Por último, la jornada de protestas en la sanidad gallega concluyó con la huelga en el Hospital Universitario de Ourense debido a la falta de acuerdo de trabajadores y la dirección por mejoras laborales. Los sindicatos hablan de un 80% de seguimiento y el Sergas, del 18,6%.