El Sistema de Atención a la Dependencia (SAAD) acumula un recorte de 2.000 millones de euros en estos cuatro años de legislatura y unas 400.000 personas con derecho reconocido permanecen en lista de espera, lo que supone un incremento de 156.761 personas desde julio de 2012, según los datos del último Observatorio Estatal para la Dependencia que elabora periódicamente la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales y que denuncia la "demolición" de la ley de dependencia.

Los expertos señalan que se finaliza la legislatura con 1.178.483 personas que tienen reconocida su situación de dependencia (el 2,5 % de la población). Esto supone que hay 105.197 personas menos valoradas como dependientes con respecto a 2012.

La Asociación de Directores y Gerentes en Servicios Sociales denuncia, asimismo, que la aplicación del nuevo baremo ha supuesto que actualmente haya 64.211 grandes dependientes menos, 16.794 severos menos y 24.200 moderados menos, mientras que ha aumentando un 5 % (hasta los 65.871) el número personas valoradas que no obtiene grado (21,5%).

Además, el número de personas atendidas se ha mantenido en los últimos tres años en torno a los 779.373 beneficiarios actuales, lo que supone que hay 1.163 personas menos que reciben prestaciones o servicios con respecto a 2012. De esta manera, el sistema no es capaz de atender a 400.000 personas.