El hombre más gordo del mundo, el mexicano Andrés Moreno, ha fallecido este viernes mientras era trasladado al hospital San José de Ciudad Obregón a causa de un infarto al miocardio.

"Falleció a las 8:30 (hora local) de la mañana en ambulancia, de un infarto al miocardio mientras era trasladado de su casa al hospital San José", señaló Carmen Palacios según recogió el portal 'Univision'.

Llegó a pesar más de 440 kilos y su vida se convirtió en un auténtico infierno. El mexicano Andrés Moreno, considerado el hombre más gordo del mundo, fue intervenido a finales de octubre para someterse a una complicada operación que le haría bajar de peso y llevar una vida mejor.

Sin embargo, Moreno, de 38 años, ha fallecido repentinamente a causa de un infarto.

Desde que fuera operado, Moreno, natural de Ciudad Obregón (Sonora), había conseguido bajar de peso e incluso había comenzado a caminar poco a poco cogido de los hombros por un familiar.

El mexicano fue sometido a una complicada operación de derivación biliopancreática con cruce duodenal de la que salió bien y cua finalidad era bajar de los 323 kilos que pesaba antes de ser sometido a la cirujía a unos 80.

Según los médicos del hospital Arboledas, situado en Guadalajara, (Jalisco), donde Andrés fue operado, éste se encontraba "estable". Pero la intervención no fue sencilla. "No fue nada fácil porque inclusive se nos doblaron los instrumentos y tuvimos que utilizar dos equipos insufladores de gas; normalmente usamos uno", dijo a la prensa José Castañeda, el bariatra que dirigió la cirugía.

El equipo de cinco médicos utilizó una técnica laparoscópica poco invasiva para cortar tres cuartas partes del estómago de Moreno, de forma que este órgano funcione en forma de tubo. También dividieron el duodeno para conectarlo con una parte del intestino y el páncreas y la vesícula biliar, lo que cambió su proceso digestivo.

La historia que está detrás de la obesidad de Andrés Moreno no es fácil. "Mi papá falleció y eso me empezó a deprimir porque yo era su amigo y su hijo a la vez" comentó poco antes de ser intervenido a un reportero de Azteca Noticias.

Un estado al que también contribuyó el hecho de que su pareja lo dejara. Eso ahondó en su tristeza, se encerró y cada vez comía más: "Hasta dos kilos de frijoles".

Llegar al hospital donde fue operado también tuvo sus dificultades. Cinco bomberos tuvieron que ayudarlo a subir a una ambulancia que le trasladó a Guadalajara.

Andrés quería llegar a pesar 80 kilos y dedicarse a impartir conferencias para ayudar a otras personas en su misma situación.

Moreno llegó a lanzar un desesperado mensaje en su página de Facebook: "Hola amigos y familiares, disculpen si los molesto con mi publicación; me da mucha pena pero necesito de su ayuda con lo que ustedes puedan y esté a su alcance para hacerme la operación de bypass. Mi peso es ya más de 300 kilos; mis pies ya no me pueden, casi no puedo caminar y he sufrido de preinfarto. La verdad, estoy desesperado".

Moreno será enterrado este sábado en Sonora.