El Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) cuenta con un "plan de contingencias" de medios materiales y humanos para afrontar la llegada de un "eventual impacto elevado" de la gripe en la población gallega, que prevé "a partir de la próxima semana".

El director de Procesos sin Ingreso y Urgencias de la Xerencia de Xestión Integrada coruñesa, Ricardo López Boullón, aseguró ayer que, por el momento, no se ha alcanzado el llamado pico de la epidemia, aunque "estamos en fase ascendente". Entre las medidas que se contemplan, "se podrían reasignar todas las camas posibles, entre otras en el Abente y Lago y en el Hospital de Oza, y se implementarían donde se pudiera". Además, López Boullón especificó que "se podrían llegar a suspender operaciones de patologías benignas" si así se requiriera y "se aumentaría el personal necesario para atender" el incremento de pacientes. En el caso del Servicio de Urgencias, señaló que "ya está siendo reforzado".