El coruñés Mario Fernández, jefe del Servicio de Otorrinolaringología en el Hospital Universitario del Henares (Madrid), ha desarrollado una técnica quirúrgica pionera en el mundo -la laringectomía total transoral- que permite extraer la laringe por la boca. Desde su nacimiento en 2015, solo se han practicado cuatro intervenciones en el mundo de este tipo: tres en Madrid y una en Cataluña.

Este método nace de una técnica anterior patentada por el médico coruñés hace dos años, la cirugía transoral ultrasónica (Touss), que permite tratar tumores de faringe y laringe a través de la boca sin necesidad de realizar una incisión, así como otras lesiones en el cuello y cabeza. Esto hace que se reduzca el sangrado y que la recuperación del paciente sea mucho más rápida. Se han realizado alrededor de 80 intervenciones de este tipo en España como solución para tratar a pacientes con tumores de base de lengua, de pared lateral de faringe o de amígdalas, entre otros. "Se trata de introducir un endoscopio para quitar el tumor en vez de usar un microscopio -un aparato que está fuera del paciente-. Y luego para resecar los tumores utilizamos un bisturí de ultrasonidos que permite que no haya sangrados", explica el médico coruñés.

Mario Fernández recuerda que fue en una reunión en 2010 en Boston (EEUU) en la que se mostraba una intervención endoscópica realizada a través de un robot, cuando decidió inventar una técnica similar pero sin la necesidad de utilizar una tecnología tan cara. "Aquello era muy atractivo pero el robot es un recurso que vale dos millones de euros y necesita una inversión en mantenimiento anual de 100.000 euros y 3.000 en material para cada operación; por lo que no es accesible y menos para la seguridad social española", comenta Fernández, quien relata que su meta era extraer una laringe por la boca, algo que ya se había realizado en Bélgica pero con la utilización del robot. "Para mí era un reto hacerlo sin él para que fuese accesible a todo el mundo; no a todos los médicos sino a todos los pacientes que es lo más importante", apunta el otorrino coruñés.

Los cuatro casos de laringectomía total transoral realizados hasta el momento han sido un éxito, por lo que ya se preparan para el quinto el próximo 15 de marzo en Tarragona. "Esto está siendo un boom, porque todos estamos concienciados de que el endoscopio es el instrumento del futuro. Yo no he hecho otra cosa más que abrir la puerta y demostrar el potenciar de la técnica; este será su año", explica Mario Fernández, quien destaca que ya tiene solicitudes de Chile para poder implantarla en el país y que están trabajando con Japón para poder adaptar el material a las cirugías que están diseñando ya que aún están en "fase de desarrollo".

Una de las principales ventajas con las que cuenta esta técnica en comparación con la cirugía tradicional es que "no se necesita lesionar un tejido sano para poder llegar al problema, lo que en determinadas ocasiones, cuando los pacientes están radiados y los tratamientos de radioterapia y quimioterapia fallan y lo dejan todo lesionado, cobra muchísima importancia porque no quedan prácticamente secuelas". La rapidez tanto en la intervención como en la recuperación del paciente, que puede volver a hablar, tragar y comer en poco tiempo, son otros de los puntos favorables que se derivan de esta técnica.

Otra de las ventajas, en este caso a nivel profesional, es que es una "muy intuitiva y la puede hacer todo el mundo; yo voy por los centros a explicar cómo se hacen este tipo de cirugías y asisto a conferencias, pero hay médicos que ven un par de vídeos de cómo lo hago, se dan cuenta de la filosofía y se ponen manos a la obra; esto es algo es muy positivo".

De momento el médico coruñés no le ha encontrado límites a este método. "Yo ya he quitado un tumor que entraba dentro del esófago y he resecado un trocito, lo cual para nosotros es algo inusitado. Creo que nos va a permitir acceder a muchos sitios; yo he demostrado el potencial extrayendo una laringe completa pero esto es una puerta abierta y aparecerán indicaciones. Por ejemplo, en la cirugía para la apnea del sueño -trastorno común de la respiración que afecta a millones de personas- ya hemos hecho casos y tardamos 15 minutos", explica el otorrino.

En Galicia también hay especial interés por esta técnica innovadora. En A Coruña, lugar de nacimiento de Mario Fernández, el doctor ha realizado un par de casos mediante la técnica Touss y el otorrino del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) Pablo Parente está comandando la implantación del método en el centro médico. "Hemos formado un grupo a nivel nacional con gente de todos los sitios donde esto ha despertado interés. Ya realizamos nuestra primera reunión fundacional y haremos la de presentación en el Chuac el próximo 12 de marzo, por cuestiones meramente románticas, para sentar las bases y lo transformaremos en un trabajo corporativo con el fin de integrar las experiencias y hacer que navegue lo más rápido posible", comenta Fernández, quien también destaca que no es fácil hacerle la competencia a la cirugía robótica "ya que es muy fácil subirse al carro de las nuevas tecnologías y seguir a la máquina, pero lo difícil es diseñar estrategias o procedimientos que sean accesibles a todo el mundo". Para el especialista "las soluciones tienen que venir de problemas reales del quirófano y la tecnología tiene que aparecer para resolverlos, no al revés", como suele ocurrir cuando salen innovaciones tecnológicas al mercado y se tienen que pensar sus posibles usos.

Otorrino de profesión gracias a su abuelo, el famoso médico de deportistas e incluso del Deportivo durante 25 años, Víctor Fernández Alonso, Mario Fernández recuerda también a José Martínez Vidal, en su día jefe del Servicio de Otorrinolaringología del Chuac. "Un día me llevó al quirófano y dije 'yo quiero hacer esto'. Luego estudié medicina en Santiago y estuve en el Chuac hasta 2008, año en el que me ofrecieron venir al hospital de Henares", explica.

El médico asegura no olvidarse de su tierra. "La Torre de Hércules siempre viene conmigo", comenta en referencia a un cuadro que cuelga en su despacho en la Sociedad Española de Otorrinolaringología -de la que es secretario- con la imagen del faro romano.