"Me parece bien que el Nobel se abra a la música porque las canciones no son la hermana pequeña de la poesía, como algunos creen; ambas son literatura, y espero que Dylan, con muchas canciones que son verdaderas obras literarias, sea el primero de una larga fila de premiados", afirma Pastoriza, que destaca que el galardonado "no hace canciones, sino que musica sus letras".