Los ingresos a causa de la gripe se dispararon en el área sanitaria coruñesa en la última temporada, comprendida entre el 28 de septiembre de 2015 y el pasado 15 de mayo. Hasta ahora, el récord de hospitalizaciones por este virus se había registrado en 2009, año de la aparición de la gripe A y en el que 169 personas tuvieron que ingresar en el Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) por esta dolencia o sus complicaciones. Sin embargo, esta cifra casi se triplicó en la última temporada de gripe cuando los ingresados ascendieron a 474. "Una cifra que representó al 28% del total de hospitalizados en Galicia", según explicó ayer la jefa del Servicio de Medicina Preventiva del Chuac, María José Pereira. "Este incremento de ingresos no hizo que aumentasen los pacientes derivados a la UCI ni la mortalidad por el virus", señaló durante la presentación de la campaña de vacunación de la gripe que arrancará en toda la comunidad el próximo lunes 24 y que permitirá inmunizarse contra el virus hasta el 23 de diciembre.

Desde el Chuac reconocen que la pasada temporada de la gripe fue característica ya que "pese a la baja incidencia del virus, hubo más ingresos que en años anteriores". En concreto, un total de 1.691 pacientes gallegos tuvieron que ingresar en un hospital debido a las complicaciones de la gripe, de las que más de la mitad (el 58%) residían en la provincia de A Coruña, según informaron ayer fuentes de la Consellería de Sanidade. El área sanitaria coruñesa es la que registró un mayor número de hospitalizaciones (474), seguida de la de Santiago (332) y la de Ferrol (168). "En cuanto a las derivaciones a la UCI, el Chuac estuvo por debajo de la media gallega: un 12%, frente al 14% autonómico", explicó Pereira, quien atribuyó la elevada cifra de ingresos a que ha mejorado el sistema de vigilancia y las pruebas para detectar si un hospitalizado tiene el virus de la gripe. "Ahora mismo hay tests rápidos que no había hace diez años", señaló Pereira.

Tanto esta especialista como el responsable del Servicio de Alertas Epidemiológicas de la Jefatura Territorial de Sanidade en A Coruña, Manuel Porto, coincidieron en resaltar que pese a la creencia popular la gripe es "una enfermedad grave" que puede cursar de forma leve, pero también generar complicaciones en pacientes con otras patologías e incluso en personas sanas. Prueba de ello es que sólo en la temporada pasada, este virus y sus complicaciones causaron la muerte de un centenar de personas en toda Galicia, 59 de la provincia de A Coruña y 30 en el área sanitaria del Chuac.

Por ello, desde Sanidade instan a la población en riesgo a vacunarse contra la gripe. "La mayoría de los ingresados no se había puesto la vacuna", señaló Porto, quien explicó que el principal objetivo de esta campaña es "evitar o disminuir las complicaciones de la gripe". Para ello, la Xunta ha adquirido 530.000 dosis -más de 200.000 serán para la provincia de A Coruña- que se distribuirán entre los 900 puntos (entre Atención Primaria y especializada) de toda Galicia en los que será posible inmunizarse contra el virus. "La cifra de dosis es aproximada, pero si se precisan más, se adquirirán más", señaló Porto, quien explicó que la onda de la gripe no suele producirse hasta al menos mediados de diciembre, por lo que insta a los ciudadanos a espaciar su visita al médico para ponerse la vacuna. "No tendrán prevención adicional por venir todos las primeras dos semanas", resaltó.

Los expertos resaltaron, durante la presentación de la campaña, que la vacuna de la gripe va dirigida a todos los mayores de 65 años, personal sanitario, ciudadanos ingresados en instituciones cerradas como cárceles o residencias de la tercera edad, embarazadas en cualquier trimestre y pacientes con enfermedades cardiovasculares o respiratorias crónicas así como pacientes con obesidad mórbida o enfermedades metabólicas, entre otros. "Además, y que no suelen hacerlo, todas las personas que convivan con personas del grupo de riesgo tienen que vacunarse", señaló Porto, quien explicó que la vacunación también está abierta a todas las personas que pese a no pertenecer a estos grupos quiera inmunizarse contra el virus. El objetivo de la Xunta es lograr una cobertura del 65% en mayores de 65 años y del 35% entre los sanitarios.