El juez de Menores Emilio Calatayud abogó por denunciar a los menores que convierten la convivencia familiar en "un infierno" por sus agresiones físicas y psicológicas a los padres, un tipo delictivo que crece y que ha relacionado con la pérdida de autoridad paterna que les quita el derecho a corregir. El titular del Juzgado de Menores 1 de Granada hizo estas consideraciones durante la presentación en Granada de AdhocProject, una iniciativa impulsada por Meridianos y que pretende ofrecer una solución alternativa a la violencia filioparental.

Calatayud explicó que las denuncias por violencia contra los padres ejercida por menores se ha convertido en uno de los delitos "que más sube", un delito además "típico de las clase media y media alta, que deriva en maltrato físico y psíquico".

"He visto bocas partidas, piernas rotas de padres como consecuencias de las agresiones que sufren de sus hijos", recalcó Calatayud, que ha relacionado este tipo de agresiones con la pérdida de autoridad de los progenitores.