El Diccionario de la Real Academia Galega (RAG) está en constante actualización. Las últimas incorporaciones tuvieron lugar ayer mismo. Exoplaneta ("planeta que orbita arredor dunha estrela fóra do sistema solar"), asterismo ("figura que forma un conxunto de estrelas que poden pertencer á mesma constelación ou a constelacións diferentes") y meteoroide ("corpo celeste, xeralmente un fragmento dun cometa ou asteroide, que orbita arredor do sol") subieron con su acepción al diccionario en línea. En su caso, fue tras analizar la petición de un colectivo de astronomía, según confirmó la propia Academia.

Una portavoz de la entidad explica que las propuestas de inclusión de nuevos términos, normalmente, parten de tres emisores: el personal que realiza el diccionario; los académicos; o una propuesta particular enviada a través del correo electrónico, teléfono o la web del diccionario. En el caso de una propuesta particular en cuanto llega a la RAG, "se trabaja en la definición, se ve si la inclusión es oportuna y después la petición va al seminario de Lexicografía (compuesto por miembros de número de la Academia)" que toma la decisión final de incorporarlo o no. Se trata de un proceso continuo que puede tardar meses en llegar al final.

Entre las ultimas propuestas particulares recibidas está la de incluir el término furancho, como se denomina popularmente a unas bodegas ubicadas principalmente en la zona de las Ríaz Baixas que venden excedente del vino, acompañado de tapas. Desde la RAG confirman que estudiarán la propuesta recibida hace unos días para que furancho salte al catálogo de palabras oficiales en gallego.

Pero ¿en qué medida los términos coloquiales de nueva creación tienen más dificultad que otros cultos y especializados en entrar? Respecto al último grupo, una trabajadora de la RAG explicaba que "este tipo de cuestiones no son muy problemáticas porque ya se están utilizando, el uso está asentado, normalmente en las lenguas más próximas están incluídas también".

Otra cuestión son palabras como choripán, el bocadillo que se ha hecho popular en los últimos años en ferias medievales o puestos ambulantes de diferentes eventos. "Términos como este se toman con más precaución. Tienen mucho éxito momentáneo pero hay que ver si se acaban asentando", avisa Carme Pazos.

Esta experta en Lexicografía en la Real Academia Galega resalta que términos similares pueden acabar en el cajón de las "modas" efímeras. Es la sección de Terminoloxía la que estudia la palabra, si es la forma más adecuada... "Lo de de choripán, por ejemplo, muy gallego no es. En todo caso, sería chouripán y habría que ver si realmente coincide con la forma autóctona del bollo preñado", apuntaba esta experta sobre una posible incorporación del término al diccionario.