Lleva meses preparándose y funciona desde el pasado fin de semana, tanto "a cara descubierta" como desde la sombra, aunque la prueba de fuego serán los próximos días. Es el dispositivo de seguridad del World Pride, muy importante pero sin novedades sobre otros grandes eventos y sin una amenaza específica. A tres días del gran desfile del Orgullo Gay que discurrirá el sábado por el centro de Madrid, entre Atocha y Colón, con más carrozas que nunca y con la previsión de reunir hasta tres millones de personas, se han cerrado las cifras principales de seguridad, aunque sigue habiendo reuniones de coordinación.

Policías a pie, en coche, en moto, a caballo, bajo el suelo y con perros especializados, además de los "antidisturbios", vigilan desde el pasado viernes -y en algunos casos desde hace semanas- los lugares de mayor concentración de personas, tanto en la zona de Chueca -epicentro del Orgullo- como en todo el centro y también en puntos sensibles como el aeropuerto de Barajas y las estaciones ferroviarias de Atocha o Chamartín.

Fuentes policiales cifran en más de 2.000 el número de agentes que llegarán a estar desplegados estos días, entre Policía Nacional y Policía Municipal, a los que se sumarán cientos de efectivos del Samur y otros servicios de emergencia. Entre 1.000 y 1.100 policías nacionales integran el dispositivo, aunque esta cifra podrá aumentar hasta 1.400 el sábado, según fuentes del Cuerpo. A estos se sumarán unos 1.200 agentes municipales, 300 voluntarios de Protección Civil, 100 profesionales del Samur y seis retenes de bomberos.

Se trata de un dispositivo muy amplio y sobre todo muy meditado, calculado durante meses, y que no incluye novedades importantes sobre los que se han montado en los últimos grandes eventos, como el fin de semana de junio en el que coincidieron la final de la Liga de Campeones y el concierto de Guns n' Roses. Y es que, fuera de la prevención que incluye el nivel 4 de alerta antiterrorista, "no hay ninguna amenaza específica con motivo del Orgullo", repiten diferentes fuentes: ni desde el ámbito yihadista ni desde colectivos "contrarios" al colectivo Lgtbi como los neonazis.

Según las informaciones recabadas de todas las "antenas" que tiene puestas la Policía desde hace meses, la principal preocupación debe ser la gran aglomeración de personas por el centro de la capital, sobre todo en el desfile del sábado por la tarde, que como ocurre siempre en estas ocasiones podría conllevar avalanchas, peleas o robos.

También podrá haber algún pequeño incidente, como el ocurrido el pasado fin de semana en la Plaza de Pedro Zerolo -uno de los lugares más emblemáticos del Orgullo-, cuando tres jóvenes fueron detenidos por insultar y escupir a una pareja homosexual.

Para afrontar estas situaciones habrá desplegados entre la gente numerosos agentes especializados en atracos y también de Información y de Extranjería, la mayoría de incógnito, junto a los policías uniformados. Por el momento no está previsto que se desplieguen francotiradores, como ocurrió en la proclamación del rey Felipe VI.