El uso en público del burka quedará prohibido en Austria a partir de hoy, mediante una ley que ha sido criticada como populista, innecesaria y difícil de aplicar, y que puede afectar más a las turistas ricas de países árabes que a las pocas musulmanas que usan esa prenda en el país.

La norma establece que "quien en los espacios o edificios públicos se cubra u oculte el rostro con ropa u otros objetos, de manera que no sea reconocible, está cometiendo una infracción", punible con hasta 150 euros. La redacción de la ley se cuida de no usar las palabras "burka", "nicab", o "Islam".