Más de 76.000 escolares gallegos de Primaria y Secundaria llenan su mochila este año con todos, o casi todos los libros que precisan para el curso a través del sistema de préstamo instaurado por la Xunta para todos los niveles educativos, excepto para Infantil y 1º y 2º de Primaria, donde mantiene las ayudas a la adquisición de manuales porque los niños trabajan en ellos y no son reutilizables.

Según los datos aportados ayer por la Consellería de Educación, la Xunta repartió de forma gratuita durante este curso un total de 636.308 libros de texto del fondo solidario y lo hizo entre 109.269 alumnos de 3º a 6º de Primaria y de los cuatro cursos de ESO. Los manuales se reparten en orden inversa a la renta per cápita familiar -se les entregan más a quienes tienen menos- y si hace falta el centro compra los complementarios que sean necesarios para que la cobertura sea similar a la de quienes perciben ayudas, un sistema que financia, en función del caso, cuatro o seis libros por alumnos.

Al final, y siguiendo criterios de renta, explican desde Educación, siete de cada diez alumnos de Primaria y de ESO beneficiarios del fodo recibieron seis o más libros gratuitamente, y dado que, alega, la media de manuales por centro es de seis por curso, "en estos casos quedó cubierta la práctica totalidad de sus necesidades".

El principal desembolso que realiza el Ejecutivo está destinado a cubrir los gastos de material escolar. La siguiente cuantía más elevada es la destinada a las ayudas de libros de texto (4,6 millones). En el caso del fondo solidario, lo que se gasta (2,14 millones) se destinada a que los centros completen el sistema de préstamo donde no llega.