Casi ocho de cada diez sacerdotes españoles, un 78,3% reconocen que no suelen cantar o solo lo hace en alguna parte de la misa u otras celebraciones litúrgicas, según revela la 'Encuesta sobre el uso y práctica del canto y la música en las celebraciones Litúrgicas en España', elaborada por la Comisión de Liturgia de la Conferencia Episcopal Española (CEE), con motivo del 50 aniversario de la instrucción de la Congregación del Culto Divino Musicam Sacram.

El estudio, realizado entre mayo y septiembre de 2017, recoge las respuestas de 3.742 encuestados, de los cuales un 69% eran laicos, un 17,2% sacerdotes y un 12,7%, religiosos. Además, en su mayoría (85 por ciento) eran menores de 65 años y el 60 por ciento afirmó tener conocimientos musicales.

En una pregunta dirigida exclusivamente a los sacerdotes, como presidentes de la celebración, se les interroga acerca de si suelen cantar las partes que les corresponden. Un 57,3% de ellos reconoce que suele hacerlo "en algunas partes"; un 21% dice que no suele cantar; y un 21,7% asegura que canta en todas las partes.

Sobre su formación musical en el seminario, la mayoría de sacerdotes encuestados (57,2%) dice haberla recibido frente a un 42,8% que no, un dato "relevante" este último, según precisa la Conferencia Episcopal.

Por otro lado, atendiendo a las preguntas dirigidas no solo a los sacerdotes sino a todos los encuestados, de los datos se desprende que el 91,7% de los entrevistados reconoce su participación activa en las celebraciones de su parroquia o comunidad y la mayoría (63,7%) asegura que lo hace cantando.

Si bien, más de la mitad (un 60,2%) reconoce que desconoce la existencia de un secretariado o comisión diocesana de música sagrada en su diócesis, aunque un 79,4% opina que debería existir.

En cuanto a las celebraciones en las que más se canta, destacan la Misa (citada por un 97,2% de los consultados); seguida de las confirmaciones (65,3 por ciento), la Adoración al Santísimo (53,6%) y las bodas (47,5%).

En concreto, en la misa, un 95,3% asegura que, por norma general, sí se participa cantando. Atendiendo a la persona o grupo en el que recae el peso del canto, el 65,2% apunta al coro parroquial frente a un 35,3% que asegura que recae sobre el sacerdote.

Preguntados por lo que más se canta, los encuestados citan: el canto de entrada, el aleluya, el ofertorio y la comunión. No obstante, lo que consideran más importante es: Señor ten piedad, Gloria, Santo y Cordero de Dios. Sobre los géneros musicales, el gregoriano y la polifonía clásica son los que menos se cantan frente al canto religioso popular, el más cantado.

Entre las propuestas para "dinamizar" el canto y la música en la liturgia, los encuestados plantean: organizar cursos de formación litúrgico musical o crear una escuela o máster de música litúrgica; un nuevo Cantoral Litúrgico Nacional con composiciones nuevas y que contenga un CD con audio y partituras con los acompañamientos de órgano en PDF; un portal web a través del cual se pueda acceder a formación, partituras y audios; y favorecer encuentros nacionales de músicos litúrgicos.