La principal recomendación ante la aparición de un nido de avispa es avisar a las autoridades y no proceder nunca a la eliminación sin estar seguros de que se trate de una especie invasora. De hecho, esto es lo que intentan evitar a toda costa desde la AGA ya que la alarma ante la invasión de la avispa asiática ha provocado que cualquier nido sea considerado una amenaza y no es así ya que los de la avispa europea (concretamente la especie crabro) no se deben erradicar ya que esta especie, además de ayudar en la polinización a las abejas son una enemiga natural de la avispa velutina y la única que puede combatirla.

"Hay muchos nidos de avispas, los hubo desde siempre", recuerda José Fernández, que advierte de la importancia de que no se destruyan de forma indiscriminada todos los nidos que se encuentren.