La prensa recupera lectores en España. Lo constata el Libro Blanco de la Información 2017, presentado ayer en la Conferencia Anual de la Asociación de Medios de Información (AMI), celebrada en el hotel Palace de Madrid. En concreto, el informe certifica que, al cierre de 2016, contaba con 16,8 millones de lectores mayores de 14 años, lo que suponía un incremento del volumen de lectores en 140.000. Una cifra que, según avanzaron los autores del estudio, se va incrementar de manera notable al cierre de este año, ya que actualmente se sitúa en 17,2 millones, tras registrar un incremento de 517.000 lectores en los dos últimos años.

El Libro Blanco 2017 -coordinado por Enrique Yarza y Ramón Alonso Aranegui y en el que han participado Media Hotline, Deloitte y Carat-Dentsu Aegis Network- analiza los datos de 118 periódicos en papel y 218 digitales (entre los que se incluyen las ediciones online de los medios de soporte físico y un centenar de nativos digitales). En suma, se trata de un volumen de publicaciones que alcanza los 1,9 millones de ejemplares cada día, sólo en soporte papel.

El incremento del número de lectores se enmarca en un cambio de tendencia general respecto a lo registrado en los tres años precedentes. Algo que se refleja también en los resultados netos de los periódicos, que por primera vez en estos cuatro años retorna a cifras de beneficio neto, en concreto 14,5 millones de euros al cierre del ejercicio 2016, cuando en 2015 se habían perdido 2 millones. El motor de este crecimiento es el ámbito digital, que crece de manera sostenida.

Javier Moll, presidente de AMI y presidente de Prensa Ibérica Media, grupo al que pertenece LA OPINIÓN, indicó que son unos datos que animan a una "reflexión esperanzada". "Los medios de información están consiguiendo consolidar el negocio tradicional y empiezan a obtener nuevo retorno del digital, la audiencia valora el valor del contenido diferencial que ofrecemos y es el momento en que se consume más información de la historia", afirmó Moll, que apostó por crear espacios de encuentro para lograr "un periodismo fiable, autoexigente, riguroso, claro y de calidad" que integre los nuevos canales: "El periodismo del futuro debe ser innovador, tecnológico y participativo. Las nuevas tecnologías han llegado para quedarse, se han convertido en un vehículo extraordinario para difundir información y por eso debemos estar abiertos a establecer alianzas que contribuyan a que los medios de información sean el referente que necesita la sociedad".

Aparte de las cifras, en la conferencia se analizaron los retos que han de afrontar los medios en este nuevo contexto, entre ellos las noticias falsas. Unos desafíos que se analizaron en una mesa redonda en la que participaron, además de Javier Moll, Luis Enríquez (consejero delegado de Vocento) y Francisco Rosell (director de El Mundo). Actuó como moderador Juan Cruz (director adjunto de El País).

Los participantes coincidieron en la necesidad de mantener el rigor frente a los impulsos de notoriedad o la ganancia de tráfico a corto plazo en las redes, y defendieron la honorabilidad de los profesionales de los medios frente a las intenciones de otros actores que, tratando de usurpar la apariencia de medios, persiguen objetivos económicos o políticos. Javier Moll insistió en la necesidad de colaboración entre los medios, objetivo central de AMI, para garantizar la libertad de prensa e información que apuntala, y garantiza, la democracia.