Asegura que hace años el libro no tenía tanta competencia en las cartas de los Reyes Magos, pero aconseja nunca comparar lo que ofrece un cuento con otras formas de ocio porque hay riesgo a que “salga perdiendo” en la balanza de los más pequeños. “Leer es un modo de entretenimiento, de aislarse de una situación... un libro si se compara puede que siempre pierda en relación a otras formas de divertirse basadas en imágenes y sin embargo, todo lo que dan las imágenes desaparecen pronto, algo que no ocurre con el libro”, sostiene Esther Gómez, de Moito Conto, quien tienen claro que la edición es una parte muy importante de cualquier libro. “A mayores y pequeños nos gusta que tengan un tacto agradable, con bonitas ilustraciones... De hecho tengo libros con historias muy buenas pero en ediciones que no son tan cuidadas y los niños no los quieren porque les recuerdan a los libros que les mandan leer en el colegio”, sostiene.

A la hora de recomendar un libro realiza propuestas para casi todas las edades: Nosotras (de 2 a 3 años), Superpoderes (de 4 a 6), Pippi Mediaslongas (de 9 a 11 años), Elio (de 10 a 12) o Las cien noches de Hero y la colección de Percy Jackson para adolescentes. Entre lo más vendido en la librería para adolescentes o preadolescentes destaca todos los productos que se editan sobre la saga Harry Potter.