Estimado Mark. Lo primero, permíteme que te tutee. Llevó ocho años usando Facebook, así que por mis likes, comentarios e historias que he compartido en este tiempo me conoces casi mejor que mi mujer. El otro día leí una entrevista de Martin Hilbert, al que denominan gurú de la era digital, en la que aseguraba que Facebook sabe más de nosotros con 250 likes que nosotros mismos. Y creo que no va desencaminado.

Tras las presentaciones, vamos a lo importante. El pasado 11 de enero casi se me atraganta el desayuno. Mientras me tomaba mi leche con tostadas me enteré de tu último anuncio: a partir de ya vas a dar prioridad en tu red social a los contenidos que comparten mis amigos y familiares en detrimento de las publicaciones de las páginas de empresas y medios de comunicación a las que sigo.

Es la reorganización más importante que has realizado hasta la fecha del muro que tenemos cada uno de los 20 millones de españoles que usamos tu red social y de los más de 2.000 que la utilizan en todo el mundo.

No me quejo del cambio. La empresa es tuya y puedes hacer con ella lo que quieras. Ya lo dice el conferenciante y coach Alfonso Alcántara, Yoriento, "estar en las redes sociales es como vivir de alquiler, cualquier día viene el casero y te cambia las normas". Y ha llegado el casero y las ha cambiado. De arriba abajo.

En las próximas semanas empezaré a ver menos publicaciones de páginas de empresas y de medios de comunicación a las que un día decidí seguir porque me parecían interesantes. A cambio, veré más actualizaciones de mis amigos.

Insisto en que Facebook es tu empresa y puedes hacer con ella lo que quieras. Para eso la inventaste y ganas muchos millones con ella todos los años.

Pero si me permites me gustaría elegir a mí qué historias quiero leer, ya sean de mis amigos, mis familiares o las páginas que sigo. Es como si me dijeses los alimentos con los que tengo que llenar mi nevera. La llenaré con los que yo quiera, aunque a veces me confunda cuando los elijo.

A ver si va a ser verdad lo que escribí hace unas semanas que tu red social intenta fabricar una realidad a medida para cada uno de nosotros. El ciberactivista Eli Pariser lo definió en 2011 como el filtro burbuja: "una selección personalizada de la información que recibe cada individuo que le introduce en una burbuja adaptada a él para que se encuentre cómodo, pero que está aislada de las de los demás".

Muchas pequeñas, medianas y grandes empresas; organizaciones sin ánimo de lucro y hasta medios de comunicación como este tienen una fuente muy importante de tráfico a sus webs gracias a Facebook. Ahora, ese tráfico se va a reducir casi a nada, a no ser que pasen por caja. Aunque si no han puesto todos los huevos en la misma cesta no van a notar mucho tu cambio.

Voy terminando, que me está quedando un poco larga la carta.

Dices que los usuarios estamos sobresaturados de contenidos de empresas. Ok, Marc, estoy de acuerdo. Y que por eso vas a priorizar los que comparten amigos y familiares. Lo puedo entender.

Pero si no te importa ¿puedes explicarme por qué si esas páginas de empresas pagan por anunciarse en tu red social sus contenidos sí que aparecerán en mi muro? ¿Estamos sobresaturados los usuarios de contenidos de empresas? ¿O solo de los contenidos de las empresas que no pagan?

Y no te estoy criticando, Marc. Me conoces muy bien desde hace ocho años.

Facebook está en este mundo para ganar dinero como cualquier otra empresa, pero tengo esa duda.

Atentamente espero tu respuesta. Manolo Rodríguez.