La pobreza y el bajo nivel educativo engordan. Al menos son los principales factores socioeconómicos, y por ese orden, que influyen en un mayor riesgo de obesidad en los niños, riesgo de obesidad en los niños según un estudio de los doctores Pilar Magdalena, Manel Antelo y Juan Carlos Reboredo. Su investigación, publicada en Economics & Human Biology, recibió uno de los IV premios Valentín Paz Andrade, que entrega el Consello Económico e Social de Galicia (CES) y la Universidade de Santiago a través del Instituto Universitario de Estudios e Desenvolvemento de Galicia (Idega) a trabajos que ahonden en la realidad socioeconómica de la comunidad y ayuden a fijar "mejores políticas para contribuir al bienestar de sus ciudadanos".

"Los individuos que tienen mayor riesgo de padecer obesidad en Galicia, y en España en general, son niños varones de menos de 10 años y que viven en hogares con un mayor número de miembros, un menor nivel de educación, una renta baja y unos hábitos poco saludables", señala el análisis, que buscaba "profundizar en las causas estructurales de tipo socioeconómico" que determinan lo que tachan de unas "alarmantes estadísticas". Porque la prevalencia de la obesidad infantil en Galicia (8,2%) y España en general (en torno al 10%) sitúa a estas áreas "por encima de la gran mayoría de los países del entorno".

Su análisis les permite concluir "de forma inequívoca que el principal factor de desigualdad en la prevalencia de este problema es la renta del hogar en el que se vive, seguido del nivel de educación del principal sustentador del mismo, el tamaño del hogar y la edad del niño o niña", sostienen. Pero en Obesity: A major problem for Spanish minors,Obesity: A major problem for Spanish minors que ganó en la categoría de trabajo publicado en revista, no solo ofrecen datos, tras analizar una muestra de más de 13.000 niños entre 2003 y 2012; también propuestas. Para los autores "es prioritario aplicar medidas preventivas de la obesidad infantil en cuatro campos: el hogar, la escuela, los espacios de ocio y la publicidad" y también creen que "las medidas de salud pública en esta materia deberían estar dirigidas a los hogares con niños de bajo nivel de renta, cuyo sustentador principal carezca de educación primaria y que sean más numerosos".

En ese aspecto incidió la presidenta del CES, Corina Porro, al recordar que el jurado valoró que las conclusiones sobre la obesidad y sus condicionantes socioeconómicos "contribuyen a mejorar la información necesaria para diseñar políticas de salud pública de prevención y tratamiento de un problema que se está convirtiendo en una epidemia".