La cambresa Lucía Catoira debuta como nominada en los Mestre Mateo gracias a su labor en la dirección de fotografía de Dhogs, el primer proyecto que dirige en solitario. "Me hace mucha ilusión porque la película es un proyecto pequeño, modesto y además porque solo llevo 9 años en esto y la nominación hasta me parece que llega pronto", indica Catoira quien no sabe qué deparará la nominación y posible premio pero espera que sirva "para que gente que no me conocía, me sitúen".

"Nunca se sabe lo que puede suponer, yo seguiré trabajando", indica esta joven, quien pese a estrenarse con un largometraje —antes trabajó en cortos, vídeos de publicidad o videoclips— reconoce que "la implicación y el esfuerzo siempre es el mismo independientemente del presupuesto". "Lo único que varían son los tiempos", añade.

Catoira se inició en este oficio en plena crisis y cuando los proyectos cinematográficos vivían malos tiempos. Ahora nota "cierta remontada". "Hay profesionales que trabajaban fuera y han retornado o compaginan trabajos aquí y en Madrid", indica y añade que lo que está claro "es que aquí hay buena cantera, hay talento". En esta edición hay dos mujeres que optan al Mestre Mateo de dirección de fotografía, pero Catoira tiene claro que es algo excepcional. "En este sector ocurre como en otros y mujeres que sean la cabeza del equipo de fotografía todavía hay pocas", dice esta cambresa, quien dice que basta mirar el listado en la Asociación de dirección de fotografía de España para ver que el número de mujeres que trabajan en este sector no es muy amplio. Eso sí, en sus equipos siempre se ha sentido respaldada y apoyada.

Por ello y ante el movimiento mundial en defensa de los derechos de las mujeres, Catoira cree que puede haber alguna reivindicación de este tipo en la gala que se celebrará el próximo sábado en A Coruña.