La Alianza Española por la Seguridad Vial Infantil (Aesvi), integrada por la DGT y otros implicados en la materia, pide a los padres que no compren sillitas infantiles de segunda mano, así como no aceptar aquellas que han sido utilizadas previamente durante un largo periodo de tiempo. Esta es una de las recomendaciones que integran el Decálogo de Seguridad Vial Infantil, aprobado ayer por la asamblea general de Aesvi.

Este Decálogo recoge un conjunto de diez medidas "imprescindibles" dirigidas a padres, madres, tutores y demás personas que se encargan de transportar a los menores en vehículos, con el objetivo de que ningún niño fallezca o sufra heridas graves cuando viaje como ocupante de un coche.

Según destacó la DGT, "es la primera vez en la historia de España que todas las partes implicadas en la seguridad vial de los menores se unen para mejorar la protección de este colectivo".