El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha condenado al Sergas a indemnizar a la familia de una paciente, fallecida tras una intervención en Ferrol, al estimar que su impreso sobre el consentimiento informado se cumplimentó incorrectamente.

El tribunal no aprecia "mala praxis asistencial" en la intervención realizada en el Hospital Arquitecto Marcide de Ferrol, pero alude "deficiencias en la información tendente a obtener su consentimiento para prácticas médicas". Por ello, optan por elevar la indemnización fijada hasta los 25.000 euros en el caso del cónyuge de la fallecida y a 5.000 euros para el hijo.

La mujer, de 73 años, fue intervenida por tiroidectomía total por bocio. Tras la operación sufrió "paralización de las cuerdas vocales, al tiempo que presentaba dificultad respiratoria, con sibilancias y estridor". Tuvo que ser de nuevo operada y se presentó el consentimiento pero los allegados, dado su estado, no saben cómo se consiguió.