Cambiar la consideración de "chivatos" por la de "héroes" que alertan de que se está acosando a algún compañero en el colegio es el objetivo de una campaña que desde hoy lanzarán la Fundación General de la Universidad de Salamanca y la Asociación contra el bullying y el ciberbullying.

El vídeo de unos "minihéroes" de sólo tres años, que cantarán una canción creada para difundir entre los menores y sus familias el 'símbolo de ayuda universal -que consiste en unir el meñique y el pulgar y extender los otros tres dedos-, será una de las herramientas para tratar "viralizar" esta campaña, que busca aumentar la responsabilidad de los "pasivos" que ven el acoso pero no lo denuncian por miedo o por el falso convencimiento de que se convertirían en un "chivato". Todos los niños que participen en las acciones divulgativas recibirán un carnet que les acreditará como integrantes del "equipo de los héroes", a la vez que se comprometen a "pedir ayuda sin temor".

La presidenta de la asociación que promueve esta iniciativa, Carmen Guillén aseguró: "Hay que dejar de reír las gracias a los supuestos líderes y desarmarles". Daño por amor es el nombre de esta iniciativa, que pretende dar un enfoque positivo al problema, en lugar de centrarse en el reproche al acosador, ya que los valores que pretende inculcar son los de la empatía y el compañerismo entre iguales, como plantea la pedagoga que trabaja en esta campaña, Esther Rodríguez Contreras.

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En la misma línea se muestra la guía Todos contra el bullying de los letrados María Zabay y Antonio Casado: "Deben tener conciencia de la necesidad de romper la ley del silencio [...] E mejor, gesto que además los refuerza y los convierte en referentes por la valentía que demuestran, es plantarle cara al maltratador".

Esta iniciativa, con motivo del Día Internacional Contra el Acoso Escolar llega cuando se conocen nuevos datos alarmantes: el teléfono 900 018 018 -en funcionamiento desde noviembre de 2016 para atender casos de acoso escolar- ha recibido 32.500 llamadas desde entonces, de las que 12.066 responden a potenciales casos de bullying, según datos del Ministerio de Educación.

Este número gratuito, confidencial y que no deja rastro en la factura telefónica es una iniciativa del Ministerio que permanece activo 24 horas al día durante los 365 días del año, y está atendido por psicólogos, trabajadores sociales, juristas y especialistas en lengua de signos, en colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, a los que se derivan los posibles casos que se denuncian en esta línea telefónica.

Contra el acoso escolar y las consecuencias del bullying, la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (Canae) reclama políticas con un "enfoque preventivo", para lo que ha negociado con diferentes partidos la inclusión de enmiendas en esta dirección para los Presupuestos Generales del Estado de 2018. El presidente de Canae, Carles López, reclama al Gobierno que convoque el Observatorio Estatal de la Convivencia Escolar, creado en 2007 con el objetivo de que celebrase al menos una reunión anual, aunque lleva seis años sin convocarse.

Según fuentes del Ministerio, dicho órgano podrá convocarse en "las próximas semanas", después de ser reformado por el Gobierno de Mariano Rajoy.

La ONG Save the Children denunció que el acoso escolar no es solo responsabilidad de los centros educativos, sino que "faltan respuestas institucionales" y que este problema debe formar parte de una estrategia más amplia de lucha integral contra la violencia hacia los niños y niñas.

Por su parte, Cruz Roja Juventud ha puesto en marcha la campaña El ciberbullying NO me gusta, una iniciativa contra la "vulneración de derechos" que pretende sensibilizar y apoyar a los conocedores de casos de acoso escolar o ciberacoso.

Además, un estudio de la Fundación Mutua Madrileña y la Fundación ANAR revela que uno de cada tres niños españoles tiene en clase algún caso de acoso escolar. Este estudio alerta de un aumento en el número de casos en los que el acoso se produce en grupo, que alcanzaron el 66,7% en 2017 frente al 55% del año anterior. Los alumnos encuestados aseguran que las niñas se ven más afectadas por el bullying que los niños.