Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de La Laguna (Tenerife) evidencia que la ingesta continuada de panga, uno de los pescados más consumidos del mundo -especialmente en Europa- expone a niveles de mercurio superiores a los permitidos.

Este pescado procede del río Mekong en Vietnam, uno de los afluentes más largos del mundo y también uno de los más contaminados debido a la presencia de pesticidas y otros compuestos químicos empleados en los cultivos de arroz, o las actividades humanas como, por ejemplo, la deforestación. Como consecuencia, y según varios informes, el pez puede tener altas concentraciones de metales.