El papa Francisco recibió ayer a un grupo de cinco sacerdotes chilenos, también víctimas de abusos del cura de ese país Fernando Karadima. "El objetivo de esta reunión convocada por el papa Francisco es profundizar en la realidad vivida por una parte de los fieles y del clero chileno", informaron desde el Vaticano, donde añaden: "El Papa busca poner remedio a la ruptura interna de la comunidad".