La Guardia Civil investiga la muerte de una pareja y sus dos hijas menores de edad, cuyos cuerpos fueron hallados ayer en su vivienda del municipio tinerfeño de La Orotava. Fuentes de la investigación informaron de que el hombre, de 43 años y brigada del Ejército de Tierra, fue hallado ahorcado en una habitación de la casa, y en otra estancia de la vivienda estaban los cadáveres de la mujer, de 32 años, y de las dos niñas, de 3 y 5 años, sin aparentes signos de violencia. Las tres estaban tendidas sobre una cama.

Además, la Guardia Civil halló en la vivienda una nota manuscrita, según informó el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, quien, no obstante, no quiso precisar ni el contenido ni el autor de la misma.

Las fuentes próximas a la investigación consultadas tampoco dieron más datos sobre esa carta, pero confirmaron que no existían denuncias previas ni antecedentes de maltrato.

El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de la localidad, Narciso Pérez, comentó que, hacia las 12.30 horas, la Guardia Civil recibió una alerta en la que informaba sobre estos hechos y al acceder al interior de la vivienda encontró los cuatro cadáveres. Fue la abuela materna de las niñas, que vive en una vivienda contigua, la que dio el aviso tras desplazarse a la vivienda porque nadie contestaba a sus reiteradas llamadas.

Al parecer, la pareja y las dos niñas habían asistido el domingo a una fiesta familiar y nadie había percibido nada anormal en estas personas, que, según dijo el alcalde, llevaba una vida normal sin que existieran denuncias ni antecedentes de violencia.

Las mismas fuentes de la Guardia Civil indicaron que todas las hipótesis se mantienen abiertas y, al cierre de esta edición, los agentes seguían trabajando en la vivienda para recabar más indicios sobre lo ocurrido a la espera de que en las próximas horas se practique la autopsia a los cuerpos para determinar las causas de las muertes.

El alcalde del municipio de La Orotava manifestó a los periodistas que se trataba de un día "trágico" y señaló que no se puede adelantar ninguna hipótesis pues hay que esperar a que la Guardia Civil realice su trabajo.

También los vecinos de la calle Cruz de Los Martillos, donde residían los fallecidos, expresaron su pesar e insistieron en que se trataba de una familia "fabulosa" que llevaba desde siempre viviendo en este calle y que las dos niñas eran "preciosas". Un vecino indicó que la familia de la fallecida, a la que conoce desde hace más de 45 años, es "maravillosa" y "más que normal".

La familia de la mujer muerta vive en la casa colindante a la de la pareja, y hasta allí se han desplazado psicólogos del Servicio de Urgencias Canaria para prestarles asistencia.

Pasadas las 15.30 horas se procedió al levantamiento de los cadáveres y a su traslado al Instituto de Medicina Legal.