Investigadores del Ciber de Fragilidad y Envejecimiento Saludable y de Diabetes y Enfermedades Metabólicas Asociadas han relacionado el uso de los tratamientos con insulina con un aumento del riesgo de fracturas entre los pacientes con diabetes tipo 2. El estudio demuestra que hay un mayor riesgo de fractura ósea en la terapia con insulina que en otros tratamientos.