Aunque la recuperación económica ya ha llegado al PIB, miles de hogares siguen haciendo cuentas para llegar a fin de mes, números que a veces no les cuadran para pagar el comedor escolar, por ejemplo, o para que sus hijos vayan a clases de refuerzo en el cole. Al menos así lo refleja la encuesta realizada por el Instituto Galego de Estatística (IGE) que, bajo el título Cuidado de menores y conciliación familiar, recoge cómo más de 4.500 niños de entre 3 a 12 años no utilizan el comedor escolar porque sus padres no se lo pueden permitir y ascenderían a 6.605 los que, por la misma razón, no asisten a actividades extraescolares (entre ellas clases de refuerzo) en el propio centro.
Aunque estas situaciones no son mayoritarias, dado que afectan, respectivamente, al 3,7% y al 5,5% de los niños escolarizados de esas edades, otras tienen lugar fuera de las aulas del centro educativo. Así, según el instituto gallego, más de 6.600 estudiantes (el 4,3%) no asisten a clases particulares o academias porque carecen de medios, mientras que la cifra de quienes por una razón idéntica no practican actividades extraescolares o deportivas roza los 8.000 (casi uno de cada diez escolares menores de 13 años).
Los que sí acuden a reforzar los conocimientos adquiridos en el aula en alguna academia o con algún profesor, que no son pocos, dado que suponen el 27% de los alumnos de 3 a 12 años -más de 57.000 en total-, tienen que sumar más horas a sus agendas escolares: un total de 2,32 a la semana de media. Y los más de 145.000 que realizan alguna actividad fuera del colegio o practican algún deporte, añadirían 3,09. A esas actividades, a la mayoría los acompañan sus madres (61% frente a 47%). Porque el IGE, que se centra en conciliación, muestra cómo la mayor parte de las tareas vinculadas al cuidado de los vástagos siguen recayendo en buena medida sobre la mujer. El estudio muestra que existe mucha diferencia en algunas actividades. Así, un 77% de madres ayuda a sus hijos con los deberes, frente a un 59% de padres, y un 85 por ciento comparte con ellos deportes, cocina o manualidades, 13 puntos más que los progenitores varones.
