No pintaba bien, pero la jugada ha salido a la perfección en Telecinco. The Good Doctor se ha convertido en la serie del verano contra todo pronóstico. En los últimos años, estrenar una serie norteamericana en prime time venía casi con un guión preestablecido: primera noche de éxito tras un mes de promoción y fracaso a partir de la segunda emisión. En ese punto, el miedo entraba en acción, la cadena no sabía que hacer con la serie y acababa cambiándola de día sin parar o programándola a partir de las doce de la noche para dejarla ir sin hacer mucho ruido.

Esta vez no ha sido así: la serie de médicos no solo no se hundió en su segunda emisión -hoy tendrá lugar la tercera-, sino que ha alcanzado cifras más cercanas a los grandes estrenos de septiembre que a las malas noches de verano. Con dos capítulos nuevos cada semana, la serie registró el lunes pasado más de 2,8 millones de espectadores (el 20,4% de share) en el primer episodio, y más de 3,5 millones y un 25,8% de cuota de pantalla en el segundo. Una autentica proeza en su segunda semana de emisión.

El motivo del éxito puede estar en varios factores. La serie, del creador de House, David Shore, utiliza muchos de los recursos que hicieron que la ficción protagonizada por Hugh Laurie se convirtiera en un fenómeno mundial hace más de una década. Además, Freddie Highmore, su protagonista, atrapa desde el primer momento con su interpretación de un joven médico autista con el síndrome del sabio que intenta hacerse un hueco en un mundo competitivo que no entiende. Juega también a su favor que la serie de la ABC norteamericana no esté disponible en Netflix ni HBO, plataformas que ya forman parte de millones de hogares. Hasta ahora sólo podía verse en AXN España.

La otra cara de la moneda la ha vivido este verano El cuento de la criada, que no ha podido escapar de la maldición. Antena 3 estrenó la serie con cierto éxito, pero la audiencia fue abandonando semana a semana. La ficción de Hulu, disponible en España en HBO, estrenaba al mismo tiempo (y a nivel mundial) la segunda temporada de la serie, un desfase temporal difícil de procesar en los tiempos que corren.

El martes, el último capítulo de la serie, basada en la novela de Margaret Atwood y protagonizada por Elisabeth Moss, marcó mínimo de la temporada en Antena 3 quedándose en un 10,4% de share. La gala final de Bailando con las estrellas, en la que se impuso David Bustamante y su nueva novia, Yana Olina, fue la vencedora de la noche. Aún así, el programa de TVE ha pasado sin pena ni gloria, muy lejos de las expectativas que se habían creado en términos de audiencia.

La pasada semana también hubo hueco para los estrenos. La noche del miércoles fue la elegida por Telecinco y Antena 3 para enfrentar la vuelta de Jordi González y el Top 50 de Cristina Pedroche. Y Hechos reales, el nuevo programa de actualidad de Telecinco, llevó al prime time las mesas mañaneras de expertos y representantes policiales para hablar de sucesos como el caso de La Manada o el asesinato de Nagore Laffage.