Los obispos españoles han recibido con "alegría" la modificación en el Catecismo aprobada por el papa Francisco para precisar que la pena de muerte es "inadmisible", un cambio al que los propios prelados españoles ya dieron su "pleno apoyo" en una "consulta expresa" que se hizo a la Conferencia Episcopal Española (CEE) hace poco más de un año.

"Lo recibimos con alegría. Era una noticia esperada por nosotros y ya asumida por el sentir común de nuestros fieles en coherencia con el Evangelio y que ahora el Papa confirma plasmándola en el Catecismo", aseguró ayer el portavoz y secretario general de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo.

En este sentido, explicó que la CEE ya dio "su pleno apoyo" a esta propuesta de modificación en una "consulta expresa" que se les realizó hace un año.