Un equipo médico del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona ha trasplantado el hígado de un donante pediátrico a dos niñas en situación crítica de 13 años y 8 meses, respectivamente, con la técnica de trasplante hepático split, "complejo y poco frecuente", realizada en 2002 en el centro y que consiste en la división del hígado del donante en dos partes completamente funcionales. El jefe de Servicio de Cirugía Hepatobiliopancreática y Trasplantes del Vall d'Hebron, Ramón Charco, detalló ayer que se trata de una intervención "muy poco frecuente y excepcional" en la que se generan dos injertos hepáticos.

El doctor precisó que la excepcionalidad reside en que han coincidido un hígado infantil divisible con dos receptores en lista a quienes les encajara por tamaño y que estuviera a disposición todo el equipo quirúrgico. Charco indicó que pueden hacerse hasta tres trasplantes de un hígado infantil, pero no es habitual, sino que lo normal es que un hígado se use para un adulto y un niño, y no para dos niños, ya que anatómicamente resulta complejo.

La intervención, realizada en julio, consistió en extraer el hígado enfermo de las dos pacientes y paralelamente dividir el hígado sano en dos partes, implantando el trozo mayor a la niña mayor, y el más pequeño a la menor. "La complejidad reside en el tamaño de los vasos y que nada altere la unión", resumió Charco. Desde el hospital señalaron que la niñas están bien y entrando "en la normalidad".