La varicela es otra de las enfermedades infantiles cuya incidencia ha sufrido oscilaciones en los últimos años, en parte por los cambios en la vacunación de los pequeños. Si en 2011 eran menos de 4.000 los casos de esta dolencia registrados en Galicia, la cifra se duplicó al año siguiente para subir hasta los 11.500 en 2013 y alcanzar el máximo de 13.967 en 2016.

Los brotes de esta enfermedad coincidieron en el tiempo con varios cambios que afectaban a la vacunación. Durante años, los pediatras demandaban que los niños se inmunizasen contra esta patología a los 15 meses y recibieron una dosis de recuerdo a los tres años, pero la mayor parte de comunidades -entre ellas Galicia, apostaban por vacunar a los 12 años-. Una situación que hizo que muchos padres, aconsejados por los pediatras, comprasen por su cuenta la vacuna para inmunizar a los niños a edades más tempranas. Entre 2013 y 2016, el Ministerio de Sanidad prohibió la venta de la vacuna en farmacias y los casos se dispararon: de 7.659 a 13.967, según los datos de la Dirección Xeral de Saúde Pública.

Tras el retorno de la vacuna a las farmacias y los cambios en el calendario de vacunación -los niños gallegos se inmunizan ahora a los 15 meses y tres años o a los 12 si no pasó la varicela ni recibió las dos vacunas anteriores-, los casos se han reducido a la mitad: de 13.967 a 6.977.