El ministro de Cultura y Deporte, José Guirao, alertó ayer de que "igual hay que revisar" la bajada al 10% del IVA al cine en el caso de que esta medida no repercuta en los precios de las entradas. "Es una manera de hablar, pero efectivamente lo que no se puede hacer es pasarse años reivindicando el tema del IVA, reivindicando razonablemente porque yo creo que tenían razón, y, cuando llega la medida, despistarse para aplicarla", señaló en una entrevista en la Cadena Ser recogida por Europa Press.

Para el ministro, son los exhibidores y los distribuidores los que "tienen que ver" que finalmente la bajada del IVA repercuta en las entradas y "llegue a todo el mundo". Guirao señaló que los datos que maneja el Ministerio de Cultura reflejan que la mitad de las salas aplicaron esa bajada que supone entre 50 y 90 céntimos menos, cifra que "no es suficiente".

Preguntado sobre si se reunió con los exhibidores para abordar este tema, el ministro apuntó que aún no se ha producido un encuentro, pero cuando se dé trasladará la necesidad de aplicar la rebaja a "todas las entradas". "Hay que aplicarla al producto final si quieres ser competitivo. Luego no te puedes quejar", añadió el titular de Cultura.

Guirao reiteró, de hecho, que los exhibidores "ya no tienen excusa". "Se ha acabado con la queja de los productores y exhibidores de que era el IVA lo que distorsionaba la asistencia de la gente a los espectáculos y ahora ellos tendrán que ver sus márgenes de competencia", indicó.

Una bajada "obvia"

El ministro apuntó que la bajada al 10% era "obvia" porque "no tenía sentido que estuviera en un tipo impositivo tan alto tratándose de un consumo cultural". Asimismo, comparó la situación del cine con la de los conciertos, que ya experimentaron antes una bajada del IVA y los precios no se han reducido.

"Si sacas la media de precios y encima lo haces en verano, efectivamente hay una distorsión (de los precios en espectáculos en directo) que son los festivales de verano, que cada vez hay más y te suben la media", indicó José Guirao. No obstante, el ministro defiende abordar una fiscalidad conjunta.