Un hombre de 67 años mató ayer a su mujer, Dolores M. de 68, en el mismo domicilio en el que convivían, y a su madre, M.M.G. de 92, en la vivienda de la anciana, y posteriormente se quitó la vida, en Zaragoza.

La policía recibió hacia las 08.00 horas de la mañana un aviso a través del 112 en el que se informaba de que un hombre se había precipitado a la calle, en el barrio de Casablanca. El varón falleció poco después de la llegada de los servicios sanitarios, tras ser atendido en el lugar en el que fue encontrado.

Al acceder a la vivienda desde la que se había producido la caída, los agentes encontraron el cuerpo sin vida de su esposa, Dolores M. con heridas graves de arma blanca. La mujer, según la delegada del Gobierno, sufría una enfermedad degenerativa.

Posteriormente, y tras la rueda de prensa que ofreció para informar del suceso la delegada del Gobierno, Carmen Sánchez, la Policía Nacional halló en su domicilio del distrito centro de Zaragoza el cadáver de la madre del homicida, también enferma. El hombre había dejado una nota antes de precipitarse desde su vivienda a la calle, en la que detallaba las dos muertes, aunque no se facilitaron más datos del contenido de la misiva.

Dolores M. y su marido eran médicos jubilados y no constaba ninguna denuncia previa por violencia de género.

Con el doble asesinato de la madre y la mujer del asesino, el número de víctimas mortales a manos de sus parejas o exparejas en lo que va de año asciende a 31 -hay uno más en investigación-, y se trata del segundo caso registrado en Aragón en 2018.

A partir del mediodía de ayer, las banderas ondearon a media asta en la ciudad durante 24 horas en repulsa por este asesinato.

La delegada del Gobierno recordó que ya son 954 las mujeres muertas en España desde 2003 y reiteró que no cabe otra opción que ir "todos a una" para mostrar a los asesinos que "están solos" y que los vecinos e instituciones les dan "la espalda". Asimismo, instó a acudir a la concentración convocada por la Coordinadora de Asociaciones Feministas.

Por otro lado, los diputados de las Cortes de Aragón, los concejales del Ayuntamiento de Zaragoza, los diputados de la DPZ, y el Justicia de Aragón, junto al personal de todas estas instituciones y de asociaciones que se sumaron a las diferentes concentraciones, guardaron un minuto de silencio en repulsa por el asesinato de las dos mujeres ayer en esa ciudad.

En el caso de la Cortes de Aragón, la presidenta del parlamento aragonés, Violeta Barba, hizo un receso en la sesión plenaria para condenar este crimen machista.

El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, tras el minuto de silencio que se guardó a las puertas del Ayuntamiento, apostó por recomponer la situación con la educación y llevar la "igualdad de género más allá de la palabrería formal, eso quiere decir con un esfuerzo serio de todas las instituciones y todo el aparato educativo" para tratar de frenar la lacra de los asesinatos machistas.