No existen dos duelos iguales. Hay quienes encaran la muerte de un familiar sin paralizar su vida con la intención de volver a la normalidad lo antes posible, quienes se hunden durante meses y reafirman su derecho a estar mal y los que, ante todo, quieren aparentar frente a los demás que no están tristes. Todos ellos pueden precisar ayuda o apoyo para sobrellevar la pérdida en un determinado momento. Por ello, expertos en este tipo de situaciones recorrerán varias localidades de A Coruña y Pontevedra desde el domingo y hasta el jueves en la Unidad Móvil de Intervención en Crisis y Duelo gracias a una iniciativa del Centro de Escucha San Camilo de Pontevedra y el Centro de Humanización de la Salud Tres Cantos de Madrid, promovida por el arzobispado de Santiago. "El duelo supone una travesía difícil entre un lugar en el que nos sentíamos seguros hasta recuperar de nuevo esta seguridad y todas las formas de afrontarlo son válidas aunque muchas veces el afectado no encuentra comprensión en su entorno", señala el psicólogo especializado en duelo Valentín Rodil, que atenderá estas consultas sobre ruedas.

El objetivo de esta unidad móvil es convertirse en un lugar "objetivo de escucha", donde especialistas en duelo atienden de forma gratuita a cualquier persona que lo precise "y una vez analizado su caso se verá si precisa ayuda y debe ser derivado a "espacios especializados en abordar problemas con el duelo", indica Rodil, quien reconoce que no basta con acudir al psicólogo. "Muchos no están especializados y no saben de duelo", sostiene este experto, licenciado en Psicología y con Máster en Duelo.

Pese a que cada persona lo vive de una manera diferentes hay patrones comunes. "Hay ciertas tareas por las que hay que pasar para restablecerse como son no negar la realidad ni censurar las emociones, saber arreglárselas una vez pasa el vendaval de emociones y aprender a amar y a recordar a quien no esté", señala este especialista quien alerta de que en la sociedad actual es muy habitual intentar reprimir las emociones, aparentar que uno está bien e intentar continuar con la vida cotidiana cuanto antes. Algo que no es positivo. "Parece que no puedes pararte, que siempre hay que ir hacia delante y aunque está claro que cada uno vive la situación de una manera, si se niega el duelo, éste se prolongará en el tiempo", señala Rodil, quien si tuviera que dar un consejo genérico para cualquier persona que acabe de tener una pérdida, sería dar libertar a las emociones y reacciones. "No censurar ninguna", sostiene.

La Unidad Móvil del Duelo arranca su periplo gallego el próximo domingo en Ribeira, para llegar a Cangas el lunes, a Vigo el martes, a Santiago el miércoles y a Santa Cruz (Oleiros) el jueves día 6. Antes, Rodil impartirá la charla ¿Por qué nos duelen las pérdidas? Él lo tiene claro. "Porque somos humanos y tenemos apego a la familia, los amigos, el trabajo, una relación y cuando nos tocan algo de esto -sea una muerte o perder un empleo o una ruptura sentimental- nos sentimos perdidos", sostiene esta especialista, quien anima a dejar que cada uno lo viva a su manera y pedir ayudar si es necesario.