La práctica totalidad de los universitarios gallegos considera que goza de buen estado de salud. Sin embargo, sus hábitos no siempre son saludables. Uno de cada tres -el 35% de los estudiantes- consume alcohol de forma habitual y un 8% reconoce que lo hace a diario. Se inician en la bebida de media a los 16 años. Pero además en torno al 20% se alimenta mal: se saltan el desayuno y acuden más de una vez por semana a restaurantes de comida rápida. Y esto repercute en su estado físico. Casi uno de cada cinco universitarios gallegos (el 20%) sufre sobrepeso y el 5% padece obesidad.
De este modo lo revela una encuesta realizada en los campus de las tres universidades gallegas que sirvió de base para una tesis doctoral, que firma Alexandre Cadarso Suárez, de la Universidade da Coruña, y que lleva por título Estudio sobre la asociación entre la calidad de vida relacionada con la salud, la actividad física y otros ámbitos en la comunidad universitaria de Galicia.
Según este estudio, tanto hombres como mujeres se inician en la bebida con solo 16 años. Y cuando llegan a la universidad, en torno a un 35% aseguran que beben alcohol más de una vez por semana. Hay más bebedores habituales entre los hombres (el 36,7%) que entre las mujeres (32,2%).
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El consumo de alcohol se concentra, en todo caso, en el fin de semana, pero hay un 8% de los encuestados en los campus gallegos que asegura beber alcohol todos los días: son en torno a unos 6.000 universitarios.
En el otro lado de la balanza están los estudiantes que aseguran que no beben alcohol: un 20%. Y hay otro 40% que se toman una cerveza o una copa pero solo de forma ocasional.
Pero además de la frecuencia con la que beben los universitarios de la comunidad gallega, el estudio de Cadarso Suárez analiza la cantidad de alcohol que ingieren. Seis de cada diez universitarios son considerados bebedores moderados: es decir, se toman menos de 28 cañas o copas de vino a la semana, en el caso de los hombres, y 17 si son mujeres. Y solo un 0,5% supera estas cantidades, lo que lo convierte en un consumidor de riesgo.
En cuanto a los hábitos alimenticios, hay claroscuros. El estudio toma como referencia la dieta mediterránea. Y solo un tercio de los universitarios gallegos la sigue de forma "óptima". La mitad se alimenta regular y un 20%, mal.
En todo caso, en cuanto a la comida hay diferencias importantes por sexo. Las mujeres tienen mejores hábitos alimenticios que los hombres, puesto que solo suspenden en su dieta un 14% de las encuestadas, mientras que en el caso de los varones se eleva al 24,1%.
La encuesta revela datos positivos como que un porcentaje alto, por encima del 70%, consume una pieza de fruta al día y más de la mitad come pescado dos o tres veces por semana.
Sin embargo, la parte negativa está en el abuso de la comida rápida por parte de los jóvenes. Una quinta parte de los varones (el 21%) acude a un restaurante de este tipo más de una vez por semana, un porcentaje que en el caso de las mujeres se reduce al 17%. Además, según este informe, el 19% de los universitarios no desayuna y un 15% come dulces varias veces al día.
