Siete de cada cien gallegos mayores de 15 años aseguran que son diabéticos, lo que se traduce en más de 155.000 personas, según el último padrón. Los datos, extraídos de una encuesta realizada por la Consellería de Sanidade en el año 2015, muestran el elevado número de ciudadanos que en teoría podrían beneficiarse del desarrollo, como quiere el Sergas, de una app que les ayude en el "autocontrol" de su dolencia y les permita realizar un seguimiento de los parámetros que deben recopilar y vigilar e incluso darles "avisos" ante variaciones de sus niveles de glucosa.

Ese es el objetivo de una licitación de la Consellería de Sanidade con un presupuesto base de casi medio millón de euros, cofinanciados en un 80% por la Unión Europea, que también pretende participar en los beneficios de la comercialización del producto. Aunque de momento ese software es todavía un objetivo sobre el papel. Como explican desde el departamento que dirige Jesús Vázquez Almuíña, la licitación de una app específica para diabetes se realiza mediante la modalidad de compra pública innovadora (CPI), lo que implica que el Servizo Galego de Saúde (Sergas) está adquiriendo un bien o un servicio que no existe en el momento de la compra, pero puede desarrollarse en un tiempo "razonable".

Autocuidado

¿Y en qué va a consistir? Sanidade explica que busca dar respuesta a las demandas de los pacientes diabéticos y ayudarlos en su "autocuidado". En los pliegos se resume el diseño, desarrollo y puesta en operación de una app que "facilite y mejore los procesos y tareas de seguimiento y control médicos", de modo que tanto los usuarios como los sanitarios accedan a los datos de forma "segura e informada", de forma "que se potencie el empoderamiento y la autogestión de sus procesos de salud por parte de los pacientes".

La app debe incluir un módulo de seguimiento y autocontrol para el paciente que le permita gestionar el control de glucosa en su vida diaria y tiene que poder incorporar los datos, automatizados desde dispositivos, del gasto (actividad física) e ingesta calórica, tiempo de sueño y reposo y dosis de tratamiento aplicadas. Pero no solo debe acumular, sino también reaccionar si hace falta. La Xunta reclama funcionalidades avanzadas que analicen los datos y permitan generar alertas si la glucosa está alta o baja con avisos o que a partir de la información recabada detecten patrones de comportamiento que puedan "mejorar las pautas de autocontrol". Además también puede ayudar a prevenir, ofreciendo recomendaciones y pautas. También tiene que poder permitir que el usuario pueda acceder a las redes sociales de pacientes y comunidades de É-Saúde.

Se busca que esa información esté a disposición de los profesionales. La plataforma Telea ya permite un seguimiento por parte de los médicos y personal de enfermería. No obstante, hay una serie de parámetros que los diabéticos deben recoger a diario para su autocontrol y que el personal sanitario no necesita conocer en detalle, como la composición exacta de su dieta, el tiempo que dedican a la actividad física, niveles de glucosa en momentos puntuales...

Los valores recogidos en la app que sean comunes con Telea se compartirán de forma automática y el personal sanitario tendrá acceso al resto -podrá saber, por ejemplo, que el paciente tomó una pieza de fruta a las diez de la mañana o que acabó de correr durante 10 minutos- si el paciente lo autoriza.

Comercialización

La solución que encarga el Sergas requiere desarrollar tecnología "nueva o mejorada" para que se puedan cumplir los requerimientos que pone sobre la mesa, aunque el esfuerzo se verá compensado de nuevo cuando la app se comercialice, finalizado el contrato con el Sergas. La Administración sanitaria tiene derecho a un porcentaje de los beneficios de la comercialización y, de hecho, se valorará en las ofertas presentadas que permitan al Sergas hasta un tope del 50% de participación en dichos beneficios.