"Tenemos que abandonar el discurso de la queja. Es muy difícil atraer a alguien si todo el día estamos diciendo que trabajamos mucho y en precario. Contemos los atractivos. Medicina de Familia es la especialidad más bonita del mundo". El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, lanzó ayer esta petición en la inauguración de unas jornadas de Medicina Familiar en A Coruña, un día después de que los médicos anunciaran que se plantan en las negociaciones para reformar la Atención Primaria.

Almuíña aludía al déficit de médicos de familia ymédicos de familia pediatras. El Sergas acaba de aprobar un contrato para los facultativos que hacen las sustituciones, pero se quejó de que será difícil atraerlos, si los que ya trabajan denuncian malas condiciones laborales.

El conselleiro de Sanidade intentó ayer restablecer puentes con los médicos, que mantienen su pulso por la reforma de la Atención Primaria. "Tiendo la mano a seguir dialogando", aseguró, y además "sin líneas rojas, ni de presupuesto, ni de organización autónoma", en alusión a las dos principales reivindicaciones de los facultativos. A cambio, pidió "generosidad y lealtad". "Os necesitamos a todos y tenemos voluntad de apoyar todas las medidas beneficiosas", remarcó.

Almuíña defendió que son los médicos quienes "deben liderar" el diseño del nuevo modelo de Atención Primaria y planteó que "los médicos no deben hacer la primera toma de contacto con los pacientes". Deben ser las enfermeras, que deben "asumir más cometidos" en los centros de salud.

Almuíña intentó la reconciliación con los médicos después de un duro comunicado del Consello Galego de Colexios Médicos y las sociedades médicas de Atención Primaria y Medicina Familiar (Semergen Galicia, Semg y Agamfec). Los facultativos se declaran "frustrados y molestos" por "el devenir de las negociaciones para la creación de un nuevo modelo de Atención Primaria". También mantienen que, tal como adelantó este periódico ayer, "no" van a "negociar en nuevas reuniones las propuestas de mejora de la Atención Primaria", si no se atienden dos reivindicaciones primordiales para ellos: más recursos para este nivel asistencial y una dirección de Atención Primaria propia y autónoma.

Los médicos explican su plante porque, según ellos, Sanidade no les garantiza "un presupuesto suelo blindado para Atención Primaria con crecimientos sostenidos en los próximos años". Además, el director xeral de Asistencia Sanitaria del Sergas, les habría comunicado que el modelo de dirección de Atención Primaria que baraja la Xunta no coincide con la de los médicos. Ellos piden a un facultativo al frente de Atención Primaria, y las enfermeras piden su propia dirección, y al mismo nivel que la de los médicos, a lo que se niegan éstos. Sin embargo, Sanidade lo ve con buenos ojos.

También justifican su decisión de no asistir a más reuniones y de no participar en reuniones con otros colectivos porque ellos ya han propuesto a Sanidade soluciones "sobradamente reflexionadas y la consellería es la que debe decidir si las toma, o no, en consideración". Además remarcan que el origen del conflicto es la "saturación de los médicos de familia y la consiguiente falta de tiempo para atender a los pacientes".